La Ceiba, Honduras
Una ruta que estaba programada en el sistema de posicionamiento global del avión que aterrizó de manera sospechosa la tarde del domingo en el aeropuerto de esta ciudad tenía como destino final Venezuela, según confirmaron las autoridades.
Se presume que la aeronave tenía como intención reabastecerse de combustible en esta ciudad, según la lógica del plan de vuelo que traían de Toluca, México, y la ruta que se tenía programada en el sistema electrónico del tablero del jet. Esta información, más las pruebas caninas que dieron positivos de droga, son parte de las evidencias, que a criterio de las autoridades militares este avión servía para actividades relacionadas con el narcotráfico.
“Se le hizo el informe positivo en cuestión de droga, estamos esperando el resultado del laboratorio. En la parte electrónica se pudo comprobar que el avión salía de La Ceiba”, informó el coronel de aviación Javier Barrientos, jefe de la Base Aérea Héctor Caraccioli Moncada, adonde el jet hasta ayer en horas de la tarde continuaba en custodia.
Tripulación quedó libre
El oficial cuestionó la debilidad del Poder Judicial: “Los pilotos venían diciendo que venían a dejar el avión a una persona que no conocen, y que solo habían sido contratados para venir a dejar la aeronave aquí. Lastimosamente el sistema judicial nuestro en muy débil, los pilotos fueron puestos en libertad esa misma noche; pero la investigación sigue en curso”, lamentó Barrientos. Se conoció que una persona iba a llevar a los pilotos a San Pedro Sula por cinco mil lempiras.
Adonay Padilla, fiscal del Ministerio Público en el litoral atlántico, informó que esta oficina ya está desligada de este caso y que será llevado desde Tegucigalpa.