San Pedro Sula, Honduras
Las bodegas pertenecen según las autoridades a la empresa Impex, S. de R. L.
Tres personas conforman la empresa Impex S de R.L., a quien venía dirigido el cargamento de madera donde se ocultaba la pasta de cocaína que salió desde Colombia.
Los supuestos socios identificados por las autoridades son un hombre que radica en el sector de Santa Cruz de Yojoa y dos mujeres; una que reside en el barrio Sunseri y otra que vive en el barrio Las Flores de San Pedro Sula.
Se espera que estas tres personas declaren hoy ante el Ministerio Público.
Según las investigaciones las tres personas son de escasos recursos, sin capacidad de montar una empresa de tal magnitud, por lo que las autoridades consideran que fueron utilizados como testaferros para legalizar una actividad con fines ilícitos en el país.
“Han sido usados como testaferros, es gente humilde que aparece como socia de una empresa fantasma a la que venían dirigidos los cargamentos desde Colombia. Las investigaciones de forma paralela se realizan en ese país para determinar quién enviaba la droga a Honduras” dijo un investigador de la DLCN.
Toxicólogos de Medicina Forense realizarán las pruebas de campo de la sustancia encontrada para confirmar que se trata de pasta de cocaína y establecer la cantidad encontrada.
Hoy los agentes, en la inspección que harán en la segunda bodega determinarán si el lote de madera también fue utilizado para transportar la pasta de coca de Colombia a Honduras.
Desde diciembre las autoridades encontraron en un primer contenedor 716 reglas canaleteadas con pasta para elaborar cocaína.
En el segundo container hallaron 706 piezas, en el tercero 703 y en el cuarto 700 reglas, sumando un aproximado de 399 kilos de pasta de cocaína. En total se encontraron 645 kilos de pasta con las que se fabrica la cocaína.
Hoy otro equipo de la DLCN se suma hoy a la inspección para determinar la cantidad de pasta que llegó al país.
La incautación de los contenedores que venían con procedencia de Medellín, Colombia, el pasado 29 de diciembre del 2014, en Puerto Cortés, originó una investigación por parte de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) y la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN), que ayer permitió ubicar las dos bodegas donde almacenaban las regletas de madera rellenas de pasta de coca.
Fueron 10 agentes de la Atic, los que se estrenaron con el primer golpe contra el crimen organizado y con el apoyo de la DLCN, ubicaron en el sector de Curumo, en el bulevar del sur, carretera que de San Pedro Sula conduce a Tegucigalpa, una de las bodegas que alquilaban para guardar la madera.
En la inspección y después de ser auxiliados por un equipo del Cuerpo de Bomberos que con motosierra abrieron las regletas y constataron que estaban llenas de pasta de coca.
Al mediodía de ayer, una segunda bodega fue detectada en la 33 calle, en la salida a La Lima, en el sector El Polvorín, la que se encontró completamente llena de regletas de madera la que según las autoridades, también podrían contener droga.
Este segundo almacén será inspeccionado hasta hoy, una vez que se finalice la revisión en la bodega ubicada en el bulevar del sur.
“Desde el hallazgo de los cuatro contenedores en la Empresa Nacional Portuaria, los equipos trabajaron para investigar la empresa ala que venía dirigido y se estableció que es una empresa fantasma con una dirección falsa. Después de las investigaciones es que logramos ubicar las bodegas donde ocultaban la madera”, dijo uno de los investigadores de la DLCN.
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Tres personas conforman la empresa Impex S de R.L., a quien venía dirigido el cargamento de madera donde se ocultaba la pasta de cocaína que salió desde Colombia.
Los supuestos socios identificados por las autoridades son un hombre que radica en el sector de Santa Cruz de Yojoa y dos mujeres; una que reside en el barrio Sunseri y otra que vive en el barrio Las Flores de San Pedro Sula.
Se espera que estas tres personas declaren hoy ante el Ministerio Público.
Según las investigaciones las tres personas son de escasos recursos, sin capacidad de montar una empresa de tal magnitud, por lo que las autoridades consideran que fueron utilizados como testaferros para legalizar una actividad con fines ilícitos en el país.
“Han sido usados como testaferros, es gente humilde que aparece como socia de una empresa fantasma a la que venían dirigidos los cargamentos desde Colombia. Las investigaciones de forma paralela se realizan en ese país para determinar quién enviaba la droga a Honduras” dijo un investigador de la DLCN.
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Hoy los agentes, en la inspección que harán en la segunda bodega determinarán si el lote de madera también fue utilizado para transportar la pasta de coca de Colombia a Honduras.
Desde diciembre las autoridades encontraron en un primer contenedor 716 reglas canaleteadas con pasta para elaborar cocaína.
En el segundo container hallaron 706 piezas, en el tercero 703 y en el cuarto 700 reglas, sumando un aproximado de 399 kilos de pasta de cocaína. En total se encontraron 645 kilos de pasta con las que se fabrica la cocaína.
Hoy otro equipo de la DLCN se suma hoy a la inspección para determinar la cantidad de pasta que llegó al país.
