La Fuerza Nacional del Transporte realizó este día fuertes operativos con el fin de proteger sus unidades en Tegucigalpa.
Luego de paralizar durante nueve días el transporte público perteneciente a la ruta de El Carrizal debido al mal llamado impuesto de guerra, los transportistas han regresado a sus labores.
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“Todos los conductores somos amenazados por el pago del impuesto, todos estamos en riesgo, por lo que estos operativos deben de ser permanentes y cubriendo toda las rutas”, dijo uno de los conductores de una unidad de transporte.
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Pese al temor que existe por las amenazas recibidas, los empresarios y trabajadores del sector transporte se ven obligados a continuar con su labor por la necesidad económica.