Jueces y periodistas entre los 78 asesinados por uno de los 'Cachiros'

'Los Cachiros' crecieron como la espuma tras unirse a la figura más importante del hampa del litoral atlántico en los primeros años de la década del 90: Jorge Aníbal Echeverría Ramos, alias “Coque”.

“Coque” estaba bien posicionado, tanto económica como políticamente. Salió con una de las hijas de un reconocido diputado de Colón en los años 90 y Javier, aprovechando los negocios y la cercaníaque estableció con el entonces hombre fuerte del atlántico, se hizo novio de su hermana.

Pero la “luna de miel” entre Javier Rivera y “Coque” terminó, pues tuvieron una disputa que resultó sangrienta. Una balacera que se suscitó el 22 de marzo de 2003 en un restaurante de Tocoa, Colón, dejó como saldo la muerte de Osmán Isidro Rivera, uno de los hermanos de los “Cachiros”.

Los 'Cachiros' buscaron vengarse de Coque quien herido huyó a Cuba para tratarse sus heridas, luego viajó a Costa Rica donde recibió otro atentado y con sus heridas intentó huir a Panamá de donde lo deportaron a Honduras. Un tiempo más tarde fue asesinado en la cárcel de Támara.

A las cinco de la mañana del martes 8 de diciembre de 2009 fue asesinado el general Julián Aristides González, titular de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico, Dlcn. El oficial se conducía en una Nissan Patrol por el Barrio Guanacaste cuando fue interceptado por desconocidos a bordo de una motocicleta en las cercanías de la escuela José Cecilio del Valle.

Pistoleros acribillaron a tiros al periodista Nahúm Palacios e hirieron gravemente a un acompañante en Tocoa, Colón.

Palacios, de 36 años, retornaba el domingo en la noche a su casa en el barrio Los Pinos de Tocoa, a unos 400 kilómetros al norte de Tegucigalpa, cuando desconocidos lo atacaron, le dispararon con fusiles automáticos AK-47 y le dieron muerte, dijo la policía en un comunicado.

El cuerpo del periodista, que era director de noticias de un canal de televisión de Tocoa, quedó tirado en la calle, y dos asesinos huyeron del lugar. Previamente había denunciado amenzas a muerte.

Uno de los delincuentes más buscados, Juan Osorto o Héctor A. Portillo, alias Juan Zorro o Gato Negro, fue liquidado.

La historia de este trágico hecho comenzó a eso de las 7.20 de la noche del domingo cuando varios sujetos acribillaron a Fredy Alexis (primo de Osorto) en una oscura calle de la colonia Las Hadas de Tegucigalpa. Fredy cayó abatido sobre el pavimento, boca abajo. En su espalda tenía aproximadamente 16 disparos.

Los investigadores presumen que Fredy y Gato Negro iban juntos cuando fueron interceptados. En la calle fueron contabilizados 20 casquillos de bala 9 milímetros.

Según las informaciones recabadas por la DNIC, Osorto se conducía en una camioneta y fue interceptado por sujetos que se transportaban en al menos tres vehículos.

Fue hasta las once de la noche cuando las autoridades policiales fueron advertidas de la existencia de al menos seis cadáveres en el sector conocido como La Montañita. Los seis tenían señales de muerte por venganza. Los investigadores presumen que varios vehículos y sujetos convergieron en el mismo sitio.

Un día después, el cuerpo de Osorto se encontraba en un precipicio de unos 150 metros, en un lugar conocido como Los Plátanos, a unos kilómetros de Danlí. Al hacer el cotejamiento de huellas, las autoridades determinaron que podía tratarse de Héctor A. Portillo.

La abogada Judith Alemán Banegas fue acribillada junto su chofer y una tercera persona en la colonia Lomas del Guijarro de Tegucigalpa cuando circulaban en un vehículo a la altura del parque España.

La profesional del Derecho sufrió un atentado criminal el 6 de junio de 2008, en el que recibió cinco de los 14 disparos que sujetos a bordo de un pick-up le infirieron a la camioneta de lujo en la que se conducía. El atentado en aquel entonces también ocurrió en las Lomas del Guijarro.

En ese entonces, la abogada mencionó varias hipótesis sobre las causas del atentado, entre ellas 'una mafia' de jueces y fiscales que fueron destituidos en La Ceiba y Roatán, donde ella litigaba.

Alfredo Landaverde fue baleado por sicarios en el bulevar Los Próceres, en la entrada a la colonia 21 de Octubre.

Landaverde, activista de derechos humanos, viajaba con su esposa en su vehículo por la colonia 21 de Octubre, donde dos motociclistas le dispararon, dejándolos gravemente heridos y él fue declarado clínicamente muerto en el hospital.

Citado con frecuencia como analista en la prensa para comentar sobre la corrupción y los nexos de la policía con el crimen organizado, la muerte de Landaverde provocó una fuerte conmoción en Honduras en medio de la ola de violencia que agobia a la población.

La última llamada del 'Cachiro' dio la orden final de callar al periodista Aníbal Barrow. El trato estaba hecho, el narcotraficante había pagado entre 300 mil a 400 mil lempiras a José Hernán Díaz, alias “El Choco” para que este ejecutara el macabro plan de quitarle la vida al también ingeniero agrónomo.

Dos vehículos, uno de características desconocidas y un Kia Spectra blanco interceptaron el automóvil marca Honda CRV con la intención de secuestrar al comunicador que transitaba por el Estadio Olímpico de San Pedro Sula.

Los malhechores se bajaron de los automóviles y de inmediato se subieron al carro de Barrow para luego darle muerte en el interior del vehículo y luego intentar quemar su cuerpo en un matorral del sector Siboney de Villanueva, Cortés.