SAN PEDRO SULA. Una fraternal despedida con emociones encontradas se realizó para Monseñor José Vicente Nacher, quien recientemente fue nombrado como nuevo arzobispo de Tegucigalpa.
El Padre deja su cargo como párroco de la iglesia San Vicente de Paúl en la diócesis de esta ciudad y como presidente de la Fundación OSOVI, puestos que serán ocupados dentro de poco tiempo.
Monseñor José Vicente Nacher sustituye así al cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, quien a la edad de 80 años renunció al cargo. Ante su partida, la comunidad de servicio de Fundación Obras Sociales Vicentinas (OSOVI) prepararon un programa especial para Nacher con el fin de agradecerle su importante papel dentro de la organización, la cual ha luchado por años por el bienestar de los niños, jóvenes y adultos en situación de riesgo, dándoles un presente y futuro digno con el amor de Dios por sobre todas las cosas.
“Hace dos años estuvieron a punto de cerrar esta casa hogar, pero la gestión del Padre Nacher permitió que siguiera adelante para prepararnos para la vida”, manifestó un joven de la Casa del Joven.
El evento dio comienzo con una oración, con la cual se agradeció al Creador por sus bendiciones y por permitirles reunirse para celebrar por el propósito en la vida del padre Vicente Nacher. Luego, los niños y jóvenes de las diferentes casas hogares que OSOVI apoya cantaron diferentes canciones, asimismo, uno de sus beneficiados extendió palabras de agradecimiento por el cariño y constante servicio que Nacher dio a lo largo de tantos años.
Y como no podía faltar, estudiantes del Centro Educativo Vicentino Padre Antonio Quetglas, mediante un video que prepararon, brindaron un mensaje de gratitud y admiración. “Gracias Padre, lo queremos mucho”, fue una de las frases que uno de los jovencitos expresó. Para culminar, junto a los voluntarios de OSOVI, se estrenó el himno de la organización, el cual resalta los valores con los que se realizan las buenas obras.
