GRACIAS. En medio de un emotivo y sublime concierto de bienvenida ofrecido por miembros del Conservatorio Nacional de Música, el VII Festival Internacional de Poesía Los Confines dio inicio, como ya es tradición, en la Fortaleza San Cristóbal de la ciudad de Gracias, Lempira.
El protocolo continuó con las palabras del alcalde de la ciudad, Pedro Escalante; de la ministra de la Secretaría de Estado en los Despachos de las Culturas, las Artes y los Patrimonios de los Pueblos de Honduras (SECAPPH), Anarella Vélez; de la encargada de Negocios y Políticas de la Unión Europea, Sonia Vega; del poeta y director de la Editorial Universitaria de la UNAH, Carlos Ordóñez, y del poeta fundador y director del Festival de Los Confines, Salvador Madrid.
Luego fue momento de que los homenajeados de la noche: la poeta hondureña Blanca Guifarro y el poeta salvadoreño Alfonso Kijadurías, a quienes está dedicada esta séptima edición del proyecto cultural, pasaran al frente a recibir sus preseas en presencia de un jubiloso público conformado por poetas, artistas, académicos, medios de prensa e invitados especiales de más de 30 países.
También los acompañó el poeta hondureño Juan Manuel Roca, figura insignia de la edición 2020.
Por su parte, Guifarro aprovechó la ocasión para recitar con efusión y templanza algunos de sus poemas más entrañables, entre ellos “El sabor a distancia”.
Mientras que el maestro Kijadurías hizo una reflexión respecto al alcance de la poesía para unificar los pueblos y recordó la obra de los destacados autores Roberto Sosa (Honduras) y Roberto Armijo (El Salvador), a quienes expresó conservarles un profundo cariño.
La participación de la poeta estadounidense Janet Gold, un referente dentro del festival, fue una de las más sentidas de la noche. La autora dedicó su ponencia a Guifarro, sobre quien realizó una esbozada pero significativa retrospectiva.
“Las amigas son las que nos hacen darle continuidad a los sueños colectivos. Con tu poesía has enriquecido la literatura en general y la hondureña en particular. Gracias, Blanca”, pronunció.
Finalmente, los aplausos, las felicitaciones y los abrazos enfundaron la atmósfera del evento, que pasadas las diez de la noche estaba por concluir.
Pero antes, la obra del homenajeado salvadoreño también fue enaltecida. “Hoy en día se puede asegurar que Kijadurías es el mejor poeta vivo de El Salvador y uno de los mejores de Centroamérica. Son varias las voces que dan fe de estas aseveraciones”, exaltó el también poeta Alfonso Fajardo antes de dar lectura a “Oficio”, del agasajado.
