San Pedro Sula, Honduras.
No será ninguna junta nombrada por el Gobierno, ni nada que se le parezca. El hospital Mario Catarino Rivas será examinado por un grupo de expertos en gestión hospitalaria de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
La llegada de los técnicos está prevista para las próximas semanas. No se precisa la fecha, pero trasciende que será antes de que finalice el presente mes.
Como parte de la previa a ese diagnóstico, la comisión interventora del Rivas recibió ayer la visita de los representantes de la OPS y de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops), quienes llegaron a solicitud de la Secretaría de Salud para brindar asistencia técnica.
La evaluación se realizará en base las categorías que influyen en el funcionamiento de la institución. Por ejemplo, las condiciones mínimas de atención, la logística y las gestiones administrativa y financiera.
La delegación técnica estará encabezada por dos integrantes de la OPS y cinco profesionales del área de la salud a nivel nacional, quienes recibirán capacitaciones impartidas por dicha organización.
La revisión abarca el conjunto de hospitales del país. Sin embargo, la situación que enfrenta el Mario Rivas es suficiente razón para que se convierta en el centro piloto en Honduras.
El primer paso será capacitar a unos 10 profesionales de la salud que laboran en la Secretaría de Salud y el Instituto Hondureños de Seguridad Social (IHSS). Ellos serán escogidos por las autoridades para que después sean los encargados de coordinar las acciones en los demás centros.
De esas 10 personas, cinco se incorporarán al rescate del Rivas.
Benjamín Puertas, asesor en sistemas y servicios de salud de la OPS, dice que la intención es garantizar la transparencia de los procesos mediante la conformación de un equipo de expertos nacionales y extranjeros.
“Una de las ventajas de la evaluación es que es sistemática. Las categorías serán las misma y después del resultado se podrá comparar con los otros hospitales que se evaluarán”, indicó Puertas.
El instrumento de evaluación será una matriz en la que se marcarán las condiciones reales del hospital. El método funciona con un sistema de semaforización en el que se detectan de forma inmediata, mediante los colores, las deficiencias y fortalezas que se van encontrando.
Esto complementa la observación práctica que harán los expertos para comprobar los resultados de la información que han recabado.
Según Puertas, el método ha dado grandes resultados en otros países como Panamá. Se pretende un análisis a fondo desde una perspectiva exterior y llegar a una solución objetiva.
Los resultados que arroje la evaluación se convertirán en el plan de acción a corto, mediano y largo plazo. Este podría ser presentado a mediados o a finales de septiembre próximo.
“Si se logran mejorar las condiciones de este hospital ese hecho tendrá una repercusión enorme y favorable en la red hospitalaria del país”, dijo Ana Treasure, representante de la OPS en Honduras.
No será ninguna junta nombrada por el Gobierno, ni nada que se le parezca. El hospital Mario Catarino Rivas será examinado por un grupo de expertos en gestión hospitalaria de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
La llegada de los técnicos está prevista para las próximas semanas. No se precisa la fecha, pero trasciende que será antes de que finalice el presente mes.
Como parte de la previa a ese diagnóstico, la comisión interventora del Rivas recibió ayer la visita de los representantes de la OPS y de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops), quienes llegaron a solicitud de la Secretaría de Salud para brindar asistencia técnica.
La evaluación se realizará en base las categorías que influyen en el funcionamiento de la institución. Por ejemplo, las condiciones mínimas de atención, la logística y las gestiones administrativa y financiera.
La delegación técnica estará encabezada por dos integrantes de la OPS y cinco profesionales del área de la salud a nivel nacional, quienes recibirán capacitaciones impartidas por dicha organización.
La revisión abarca el conjunto de hospitales del país. Sin embargo, la situación que enfrenta el Mario Rivas es suficiente razón para que se convierta en el centro piloto en Honduras.
El primer paso será capacitar a unos 10 profesionales de la salud que laboran en la Secretaría de Salud y el Instituto Hondureños de Seguridad Social (IHSS). Ellos serán escogidos por las autoridades para que después sean los encargados de coordinar las acciones en los demás centros.
De esas 10 personas, cinco se incorporarán al rescate del Rivas.
Benjamín Puertas, asesor en sistemas y servicios de salud de la OPS, dice que la intención es garantizar la transparencia de los procesos mediante la conformación de un equipo de expertos nacionales y extranjeros.
“Una de las ventajas de la evaluación es que es sistemática. Las categorías serán las misma y después del resultado se podrá comparar con los otros hospitales que se evaluarán”, indicó Puertas.
El instrumento de evaluación será una matriz en la que se marcarán las condiciones reales del hospital. El método funciona con un sistema de semaforización en el que se detectan de forma inmediata, mediante los colores, las deficiencias y fortalezas que se van encontrando.
Esto complementa la observación práctica que harán los expertos para comprobar los resultados de la información que han recabado.
Según Puertas, el método ha dado grandes resultados en otros países como Panamá. Se pretende un análisis a fondo desde una perspectiva exterior y llegar a una solución objetiva.
Los resultados que arroje la evaluación se convertirán en el plan de acción a corto, mediano y largo plazo. Este podría ser presentado a mediados o a finales de septiembre próximo.
“Si se logran mejorar las condiciones de este hospital ese hecho tendrá una repercusión enorme y favorable en la red hospitalaria del país”, dijo Ana Treasure, representante de la OPS en Honduras.