El cierre de maquilas que ha aumentado los índices de desempleo en el país ha impactado negativamente en las ventas de los pequeños negocios que habían puesto sus esperanzas en la época navideña.
La caída en las exportaciones de un 23%, que en parte ha provocado una pérdida de 35,000 empleos en la maquila al cierre de este año, ha mermado la actividad comercial en el Valle de Sula.
Así lo destaca, Victorino Carranza, presidente del Gremio de la Micro y Pequeña Empresa (Gremipe), quien manifestó que las ventas bajaron en un 70% por la migración de hondureños de manera irregular a otros países sobre todo Estados Unidos y el cierre de maquilas.
“Hay ofertas, hay promociones, casi a precio de costo, solamente para hacer la rotación (del producto), pero hay bajas ventas. De 20 mil empleos que generamos, este año solo generamos 10 mil, el cierre de las maquilas nos afecta a todos”, dijo.
Impacto. De acuerdo a datos oficiales, unos 56 mil migrantes retornados ha recibido Honduras, una reducción del 36% versus 2022, aseguran.
Carranza indicó que los cortes de energía no programados y con previo aviso siguen afectando la producción y venta de los productos y servicios de la pequeña empresa, incapaz de comprar y sostener una planta generadora con los altos costos “de la vida”.
Hay algunos rubros de la mipyme más afectados que otros, el líder gremial enumera que son textil, calzado, metal mecánica, cuero, bisutería y alimentos.
Promover la producción nacional, apoyar a la mipyme con financiamiento, son algunas de las tareas pendientes del Gobierno, enfatizó Carranza, quien compartió que varios mipymes han vendido sus herramientas de trabajo y han decidido emigrar.
Efraín Rodríguez, presidente de la Asociación Nacional de la Micro, Pequeña Industria de Honduras (Anmpih), declaró que sin duda ha habido una reducción en ventas, algunas mipymes les fue mejor que a otras. “La perdida de empleos en la maquila y otros rubros causó impacto, creemos que arriba de 100 millones de lempiras dejaron de circular en la economía del Valle de Sula”, sostuvo Rodríguez.
Muchos mipymes comenzarán 2024 con mucho más deudas y producto en inventario por la reducida actividad comercial en esta Navidad y fin de año.
Rodríguez espera un apoyo decidido del Gobierno para el próximo año, solicita que reactiven algunos programas positivos para la mipyme como crédito solidario y aprobar leyes que simplifiquen la tramitología para la micro y pequeña empresa.
Claudia Pineda, líder de vendedores informales de San Pedro Sula, compartió que este año no ha sido mejor que el 2022 en ventas, pero siguen luchando porque no hay otra forma de subsistencia. Ante la falta de empleo emprender su propio negocio es la alternativa, es por eso que el sector informal ha crecido este año.
Junto a una socia, Jennifer Ferrera, abrió su salón de belleza Beauty Emporium este mes de diciembre esperando recibir mucha clientela por la época.
Ferrera contó que luego de trabajar por mucho tiempo su salón de belleza en su casa pudo abrir su negocio en un local comercial. “Ha sido una bendición, es un sueño que surgió en un café y Dios ha abierto puertas”, comentó Ferrera, quien señaló que aunque es difícil ser emprendedor en Honduras todo es posible de la mano de Dios.