27/04/2024
10:04 PM

Dorian Dominguez destaca como abogado pese a no tener vista

El joven oriundo de Yoro, egresado de la Unah-vs, litiga casos de familia y penal, y busca con incursionar en la política

SAN PEDRO SULA

Dorian Dario Dominguez Madrid (35) es un abogado oriundo de Yoro, que egresó como abogado en 2018, que pese a no tener vista destaca llevando casos desde penal hasta familia en los Juzgados de El Progreso Yoro y San Pedro Sula.

El 3 de febrero se celebra el Día Internacional del Abogado, con el objetivo de reconocer la labor de los hombres y mujeres de leyes que trabajan para conseguir un mundo más justo.

El 18 de mayo de 2018, Dominguez, empezó su carrera legal y desde entonces no se ha detenido pese a enfrentar retos desde que era un estudiante, ahora busca incursionar en la política para luchar contra la burocracia que ha encontrado en los juzgados como abogado litigante.

”Estuve en la universidad 8 años, y los retos fueron viajar todos los días desde Santa Rita Yoro, por más de hora y media, así como las limitaciones económicas”, comentó.

Hoy, sus tiempos en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras en el Valle de Sula (Unah-vs), son el fundamento de sus conocimientos y agradece a todos los abogados que gustosamente le compartieron los saberes.

En la universidad se apoyaba de grabaciones para estudiar y presentaba los exámenes oralmente, hoy presenta los documentos legales en tiempo y forma, con la asistencia de su secretario y un lector de pantalla en su computador, tanto para redactar escritos y la redacción de expedientes.

El togado se considera multifacético, porque ha llevado en mayoría casos de materia de familia, pero también administrativo y un par de casos penales.

“Ahorita mismo me estoy preparando para contestar un recurso de casación que va plantear el Ministerio Público en un caso de material penal. En material laboral he llegado hasta la Corte de Apelaciones, consiguiendo prestaciones a favor de mi representado”, comentó.

Dominguez recuerda entre risas que en uno de sus primeros casos, en el que representaba al demandante, fue ayudado por un hombre, para entrar en la sala, y a los pocos minutos se dio cuenta que era el demandando por la pensión. “Ahora ya no me trata como caballero”, mencionó a secas el demandado en esa ocasión.