Hasta 10 años en prisión por traficar con dinero falsificado
Las leyes hondureñas sancionan con penas de seis a 10 años de prisión a quienes falsifiquen, fabriquen, trafiquen o posean billetes falsos. Para expertos, las sanciones son insuficientes ante el impacto económico que generan

- 04 de junio de 2025 a las 11:00 /
La falsificación de billetes representa una amenaza real y creciente para la economía hondureña. Pese a su gravedad, las leyes solo imponen penas de 6 a 10 años de prisión, sanciones que expertos consideran débiles ante el impacto financiero que genera este delito.
De acuerdo con el Capítulo I del Código Penal hondureño, que regula los delitos contra la fe pública, la falsificación de moneda se castiga con penas de 6 a 10 años de prisión, además de una multa que puede alcanzar hasta 10 veces el valor de la moneda falsificada. Esta figura penal comprende tanto el papel moneda como las monedas metálicas, nacionales o extranjeras, siempre que sean de curso legal.
También son penadas conductas como el tráfico de moneda falsa (Art. 448), la tenencia con fines de distribución (Art. 449), y la fabricación o posesión de herramientas para falsificar (Art. 450), con penas que oscilan entre 4 y 8 años de prisión.
Si el delito es cometido por parte de una estructura criminal organizada, las penas se incrementan en un tercio, y si el responsable es un funcionario público, se le añade una inhabilitación de 10 a 15 años (Art. 451). Además, las condenas internacionales por delitos similares cuentan como reincidencia (Art. 452).
“Mire qué delicado este tema, y me parece que el Congreso se quedó corto con las penas para un delito tan grave como la falsificación de moneda. Este es un delito que debería tener más peso en la legislación”, opinó el abogado penalista Marlon Duarte.
El profesional comparó que, en países como Estados Unidos, este tipo de delito es considerado federal y puede incluso acarrear cadena perpetua.
Duarte explicó que no se trata solo de la fabricación o posesión de billetes falsos, sino del conjunto de delitos que pueden desencadenarse una vez que este dinero ingresa al sistema financiero. “Si alguien deposita dinero falso en una cuenta bancaria, se mezcla con otros fondos, hace transferencias o compra divisas, ya entra en el terreno del lavado de activos”, advirtió.
Para el experto, este tipo de delitos requiere una investigación de personal capacitado que no se dispone en totalidad en Honduras, por lo que es necesario pedir ayuda porque es un perjuicio para la economía el cual puede generar inflación, devaluar la moneda y disparar el precio del dólar.
"La investigación tiene que ser exhaustiva porque esos tipos son profesionales, no son personas que tienen una imprenta y se dedican a imprimir cualquier otro tipo de documento", expresó.
Amenaza
En las últimas semanas, se ha popularizado la venta de billetes falsos conocidos como "5G", los cuales han generado alerta entre comerciantes y consumidores. Se trata de copias sofisticadas que imitan billetes hondureños de diferentes denominaciones y que se promocionan y comercializan a través de redes sociales, especialmente en TikTok.
En esta y otras plataformas, usuarios ofrecen públicamente estos billetes falsificados a la población hondureña, asegurando que “pasan todos los filtros” de seguridad y que su apariencia es casi idéntica a la del papel moneda legítimo.
Las víctimas de esta estafa suelen ser pequeños negocios, vendedores ambulantes y personas con poco acceso a dispositivos para verificar la autenticidad del dinero, aunque no se descartan grandes empresas e incluso instituciones bancarias.
El economista Ismael Zepeda explicó que la circulación de estos billetes tiene serias repercusiones económicas. “Hay una afectación negativa que comienza con la pérdida de confianza en la autoridad monetaria”, afirmó, al señalar que el Banco Central de Honduras (BCH) debería garantizar controles de seguridad más rigurosos para evitar que el dinero falsificado llegue a la economía.
Zepeda explicó que la presencia de billetes falsos reduce el consumo, ya que las personas temen que su dinero no sea legítimo y pierdan su poder adquisitivo. “Imagine que alguien paga con un billete falso y recibe cambio también falso; ha perdido parte de su ingreso y no hay quién se lo reponga”, ejemplificó.
Agregó que "esto tiene que ver mucho con la debilitadad del Estado, también con un tema de bancarización que revela el tema del sistema financiero, que no es cierte, que no hay fortaleza del Estado porque en otros países ya ni billetes ni monedas se usan".
LA PRENSA Premium consultó al Banco Central de Honduras (BCH) sobre la detección de billetes falsos en circulación, pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta. En tanto, el Ministerio Público informó que hasta la fecha no registran denuncias al respecto.