28/12/2025
09:58 PM

Violencia y género

    Históricamente, los sistemas sociales y políticos patriarcales han bloqueado, en la práctica y en la legislación, la igualdad de género, la participación de la mujer en la sociedad, impidiendo total o parcialmente el goce y ejercicio pleno de sus derechos.

    Existen diversos tipos de violencia: física, psicológica, económica, sexual, amenazas físicas y verbales, manifestándose de múltiples y perversas maneras, desde la agresión directa recurriendo a la fuerza hasta la intimidación, humillación, acoso, prejuicio, estereotipo, estando omnipresente en la relación de pareja, en los centros de trabajo, en la política, obstaculizando su participación y representación, con evidente desigualdad en las relaciones de poder.

    La conducta y actuación del abogado Marlon Ochoa desde que supo que no lograría ocupar la presidencia del Consejo Nacional Electoral ha sido amenazante e irrespetuoso en perjuicio de la hoy titular de tal ente y la representante del Partido Liberal, Cosette López y Ana Paola Hall.

    Como profesional del derecho, en vez de utilizar la lógica y hermenéutica jurídica para hacer valer sus criterios, emplea intimidaciones, presiones, hostigamientos, buscando impedir y restringir, en manifiesto abuso y extralimitación de las facultades que su elevado cargo le otorga.

    Resulta oportuno divulgar la Ley Modelo Interamericana sobre Violencia Política contra las Mujeres, en su artículo tercero la define así: “Cualquier acción, conducta u omisión, realizada de forma directa o a través de terceros que,

    basada en su género, cause daño o sufrimiento a una o varias mujeres, y que tenga por objeto o por resultado menoscabar o anular el reconocimiento, goce o ejercicio de sus derechos políticos”.

    Toda dama, desde la más humilde hasta la más pudiente, merece respeto y consideración en las relaciones interpersonales. Tal es el comportamiento de un caballero que se precia de tal. Actuar en sentido contrario es propio de los machistas y misóginos.

    Honduras debe pasar de la igualdad formal o jurídica a la igualdad de hecho o sustantiva, eliminando las brechas existentes en el goce y ejercicio pleno de derechos para ambos sexos. El comportamiento del señor Ochoa resulta inaceptable, debiendo ser públicamente rechazado, debiendo abstenerse él y sus seguidores de inmiscuirse en la vida personal de las consejeras.

    Desde ya está ocasionando descrédito a su partido y a la señora Presidenta de la república.

    Es hora de empezar, desde ahora mismo, a calendarizar el cronograma electoral y a partir de allí, coordinar todas las actividades atinentes al proceso electoral.