25/04/2024
02:29 AM

270 votos

  • 28 octubre 2020 /

    A menos de una semana de las elecciones, las encuestas siguen ubicando al demócrata Joe Biden como el candidato con mayores posibilidades de ser el próximo presidente de Estados Unido; pero ni él ni su equipo se confían pese a los números favorables en la intención de voto.

    La pesadilla de 2016 no es fácil de olvidar. Las mismas encuestas que hoy sonríen a Biden favorecían a Hillary Clinton en las pasadas elecciones y, de hecho, la ex secretaria de Estado logró la mayor cantidad de votos, pero no ganó los electores necesarios en el Colegio Electoral.

    Cuando se repasan aquellos resultados, analistas que predijeron que ganaría la demócrata ahora señalan que no contaron con que personas de raza blanca, sin educación superior, se tomaran buena parte de la estadística en estados claves para el voto electoral.

    Así el panorama, y con un país polarizado, el presidente Trump puede repetir la hazaña de hace cuatro años a favor de los republicanos, por lo que ambos bandos saben que deberán esperar hasta el último minuto.

    Los medios auguran una carrera ajustada en estados como Arizona, Florida, Georgia, Michigan, Minnesota, North Carolina, Pensilvania y Wisconsin, justo donde ha tenido presencia Trump en los últimos días, visitando ciudades que son importantes porque, con las encuestas en su contra, él y su equipo saben que no pueden perder tiempo.

    Dos estados que fueron claves en las elecciones de 2016 fueron Michigan y Wisconsin, que los ganó Trump por un margen escaso. Las predicciones de hoy es que están favoreciendo al candidato demócrata y hasta pueden asegurarle la victoria.

    Porque así son estas elecciones. Cuando los estadounidenses votan para presidente lo hacen por una lista de electores designados por los partidos políticos de cada estado que se comprometen a apoyar al candidato de ese partido. No ganan por el voto popular, deben enfocarse en lograr 270 votos electorales de los 538. En 2016, Clinton obtuvo 227 votos electorales, mientras Trump ganó 304. Y aunque sus críticos lo tachen de un sistema antidemocrático, es en el Colegio Electoral, y no por sufragio popular, como se define la Presidencia —y Vicepresidencia— en Estados Unidos. Así las cosas, ya es complicado hacer predicciones de qué pasará el 3 de noviembre, pero la cereza de la incertidumbre la ha puesto la pandemia con sus restricciones, haciendo más difícil adelantar quién alcanzará esos 270 votos del Colegio Electoral, los necesarios para llegar a la Casa Blanca.