24/11/2025
05:16 PM

Futuro de la educación

José Azcona

El valor que la población les da a los estudios (y el espíritu de superación de padres y alumnos) va a hacer que este número siga mejorando, sin lograrse las expectativas en conocimientos o productividad.

El sistema que logró llevar la escuela a todo el país es insuficiente para hacernos dar el siguiente paso sin mejoras.

En esta etapa, el principal problema es el cómo garantizar y mejorar el nivel de la educación dada, y es allí donde se manifiestan los desafíos de nuestro sistema centralizado.

Este es un problema de sistema, y para atacarlo existen amplias experiencias que aplican independientemente de cualquier consideración política o ideológica.

Estudiando la guía de la Unión Europea sobre calidad en sistemas educativos encontramos varios principios que pueden ser válidos en nuestro caso.

El esquema que validan incluye participación del Gobierno en sus diferentes niveles, comunidades y magisterio en toda su jerarquía.

Esta guía propone que el sistema debe tener coherencia y estabilidad orgánica para asegurar que todos los actores se sientan parte de él.

Se debe potenciar el desarrollo académico profesional del sector magisterial de forma colectiva e institucional, construir sistemas de rendición de cuentas entre los diferentes sectores, promover la innovación, mantener canales de comunicación y diálogo, fortalecer el arraigo y participación comunitaria, y desarrollar métricas cuantitativas y cualitativas. Es importante que haya un debate general público sobre las medidas específicas de mejorar la calidad de la educación. La fase a la que hemos entrado implica buscar una mejora en la calidad, en vez de solo extender una cobertura básica. Esto requiere más participación social, creatividad y flexibilidad de parte de todos.