Redacción.
En una entrega anterior comentamos una iniciativa del COHEP para impulsar en el seno del Congreso Nacional la creación de una Superintendencia de Sociedades Mercantiles, tal como el Art. 334 de nuestra Constitución Política lo prevé. Como un complemento a lo anterior, nos referiremos hoy al control y vigilancia de las Bolsas de Valores, que en Honduras se encuentran a la deriva y que por tal motivo muchísimos ahorrantes han perdido sus inversiones bursátiles, lo que hace necesario la creación de una Comisión Nacional de Valores que venga a llenar este vacío en nuestro sistema financiero.
En la mayoría de países las Bolsas de Valores se encuentran por ley subordinadas a este tipo de controles para garantizar su efectividad y la veracidad de sus operaciones con vistas a proteger a los inversionistas en general. El mercado de valores contribuye al control de la inflación, porque impone la utilización de recursos para canalizar las disponibilidades o capitales ociosos para emplearlos en el sector productivo del país.
Es claro entonces la necesidad de implementar mecanismos que garanticen el gradual desarrollo del mercado de valores, que en Honduras es incipiente, el cual además se desarrolla en un marco institucional muy estrecho.
La importancia de crear una Comisión Nacional de Valores como existe en Costa Rica estriba en la necesidad de la existencia de dicha entidad, que propicie el crecimiento de esta parte de la economía y el bienestar del conglomerado nacional.
El Estado hondureño tiene que crear un adecuado ambiente para establecer un clima de confianza entre los ahorristas nacionales. Solamente dentro de un marco legal como el aludido es posible la revitalización del mercado de capitales, ya que por contra, la incertidumbre y el factor riesgo, no podrán ser nunca buenos catalizadores del crecimiento del mercado de valores nacional.
El insigne maestro don Roberto Ramírez (QEPD), al presentar mi libro El Control Externo en el Régimen de las Sociedades, en el cual abundo en referencias sobre este tema, expresó: “Los enfoques que hace el autor persiguen encuadrar la institución que se propone desde su origen hasta los diversos sistemas que nos ofrece el derecho comparado y que la doctrina plantea sobre este tema, que a no dudarlo es un sobresaliente trabajo de investigación jurídica que podrá ser un documento de referencia, si el Congreso Nacional decide alguna vez discutir la ley enunciada por el autor”.
Ojalá que con los impulsos del COHEP se concrete esta visión, pensando en los altos intereses de la sociedad hondureña.
