19/04/2024
08:58 AM

Sánchez Cerén, otro exguerrillero que llega al poder en América Latina

Con su investidura Sánchez Cerén, de 69 años y también maestro, se suma a otros exguerrilleros que gobiernan actualmente en América Latina,

San Salvador, El Salvador.

Salvador Sánchez Cerén se convirtió hoy en el primer excomandante guerrillero en asumir la Presidencia de El Salvador, más de 22 años después del fin del conflicto armado (1980-1992), y el quinto en la actualidad en Latinoamérica.

Con su investidura oficial este domingo, Sánchez Cerén, de 69 años y también maestro, se suma a otros exguerrilleros que gobiernan actualmente en América Latina, como Raúl Castro (Cuba), José Mujica (Uruguay), Dilma Rousseff (Brasil) y Daniel Ortega (Nicaragua).

Además de presidente de la República, Sánchez Cerén será el comandante general de la Fuerza Armada, a la que combatió en sus tiempos de guerrillero. Sánchez Cerén ganó la Presidencia por segunda vez consecutiva para el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) el 9 de marzo pasado en segunda ronda electoral ante su principal contrincante, Norman Quijano, de la opositora y derechista Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).

El ahora presidente había ganado la primera vuelta a Quijano, el 2 de febrero, por casi 10 puntos, pero ese margen se estrechó en la segunda ronda, hasta sólo 0,22 puntos porcentuales (50,11 % sobre 49,89 %), según los datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Sánchez Cerén, que hasta ayer era el vicepresidente de El Salvador, siempre dijo estar 'listo para gobernar el país y continuar los cambios' que impulsó el Gobierno de Mauricio Funes, que en 2009 sacó del poder a ARENA tras 20 años (1989-2009).

Sánchez Cerén nació el 18 de junio de 1944 en la ciudad de Quezaltepeque, departamento de La Libertad (centro), en el seno de una familia humilde y numerosa. Se graduó como maestro de la Escuela Normal Alberto Masferrer cuando tenía 19 años y luego se incorporó a la Asociación Nacional de Educadores Salvadoreños (ANDES 21 de Junio), organización mediante la cual luchó por una mejor educación y prestaciones para los profesores.

En 1968, se casó con Margarita Villalta, con quien tiene cuatro hijos, que le acompañaron hoy en su investidura presidencial. Sánchez Cerén ingresó en la década de 1970 a las Fuerzas Populares de Liberación (FPL), una de las cinco estructuras que dieron vida al FMLN, que en 2009 conquistó por primera vez la presidencia con Funes.

Durante la guerra civil fue miembro de la cúpula de comandantes del FMLN y posteriormente, en tiempos de paz, coordinador general del mismo.

Fue uno de los firmantes, en 1992 en México, de los Acuerdos de Paz que pusieron fin a los 12 años de conflicto interno del país que dejaron unos 75.000 muertos, 8.000 heridos y 12.000 desaparecidos, según los datos oficiales.

Sánchez Cerén conquistó la Presidencia junto a su compañero de fórmula, Óscar Ortiz, quien desde hoy se ha convertido en el vicepresidente del país y que también fue combatiente durante la guerra civil. Ortiz fue diputado durante dos períodos consecutivos del Parlamento salvadoreño (1994-2000), además fue alcalde del municipio de Santa Tecla (centro) por cinco períodos seguidos, desde 2000 hasta el año pasado, cuando dejó el cargo para ser candidato a vicepresidente.

Sánchez Cerén, al haberse convertido en el primer excomandante guerrillero en llegar a la Presidencia salvadoreña, superó los intentos fallidos de otros compañeros de lucha que fueron candidatos del FMLN en elecciones anteriores.

El FMLN intentó en 1994, 1999 y 2004 ganar la Presidencia con líderes que combatieron en la guerra, pero nunca lo consiguió hasta que en 2009 llevó como candidato al ahora expresidente Funes, un periodista de izquierda que no era parte del Frente.

Tras el fin del conflicto armado, Sánchez Cerén se desempeñó en varios períodos como diputado del Parlamento salvadoreño, desde el año 2000, hasta que en 2009 fue electo vicepresidente del país al ser compañero de fórmula de Funes.

Desde 2009, compaginó sus funciones de vicepresidente con el cargo de ministro de Educación ad honorem, puesto que dejó en junio de 2013 para dedicarse a la campaña electoral en la que resultó ganador.