Greenville, Estados Unidos.
Una verdadera batalla campal liderada, por supuesto, por el polémico magnate Donald Trump, se vivió entre los precandidatos republicanos en el último debate con miras a las elecciones primarias en Carolina del Sur el próximo sábado.
Los seis aspirantes a la nominación republicana para las elecciones de noviembre en Estados Unidos se enzarzaron en uno de los debates más acalorados de la campaña, marcado por la dureza contra los inmigrantes.
El encuentro empezó con los ataques personales entre los candidatos, centrados especialmente en Trump, pero también lanzados entre los dos senadores de origen cubano Ted Cruz y Marco Rubio.
Los legisladores se acusaron mutuamente de haber cambiado sus posturas sobre inmigración y de haber defendido una “amnistía” migratoria, para legalizar a los once millones de indocumentados que se calcula que viven en EUA.
Cruz, senador por Texas, acusó a Rubio de haber dicho en Univisión que no acabaría en su primer día de presidencia con las acciones ejecutivas que Obama proclamó en noviembre de 2014 para frenar la deportación de cinco millones de indocumentados.
“No sé cómo puedes saber lo que dije en Univisión si no hablas español”, atacó Rubio, a quien Cruz respondió en castellano: “Marco, ahora mismo dilo en español si quieres”.
En tanto, Trump reiteró sus planes de deportar a todos los inmigrantes que viven en EUA. “Quiero cuidar de todo el mundo, pero primero los nuestros”, dijo.
El magnate también arremetió contra los Bush al decirle a Jeb que “las torres gemelas cayeron durante el mandato de tu hermano. Recuerda eso”. Trump se refería a los atentados del 11-S, que tuvieron lugar cuando George W. Bush era presidente.
Una verdadera batalla campal liderada, por supuesto, por el polémico magnate Donald Trump, se vivió entre los precandidatos republicanos en el último debate con miras a las elecciones primarias en Carolina del Sur el próximo sábado.
Los seis aspirantes a la nominación republicana para las elecciones de noviembre en Estados Unidos se enzarzaron en uno de los debates más acalorados de la campaña, marcado por la dureza contra los inmigrantes.
El encuentro empezó con los ataques personales entre los candidatos, centrados especialmente en Trump, pero también lanzados entre los dos senadores de origen cubano Ted Cruz y Marco Rubio.
Los legisladores se acusaron mutuamente de haber cambiado sus posturas sobre inmigración y de haber defendido una “amnistía” migratoria, para legalizar a los once millones de indocumentados que se calcula que viven en EUA.
Cruz, senador por Texas, acusó a Rubio de haber dicho en Univisión que no acabaría en su primer día de presidencia con las acciones ejecutivas que Obama proclamó en noviembre de 2014 para frenar la deportación de cinco millones de indocumentados.
“No sé cómo puedes saber lo que dije en Univisión si no hablas español”, atacó Rubio, a quien Cruz respondió en castellano: “Marco, ahora mismo dilo en español si quieres”.
En tanto, Trump reiteró sus planes de deportar a todos los inmigrantes que viven en EUA. “Quiero cuidar de todo el mundo, pero primero los nuestros”, dijo.
El magnate también arremetió contra los Bush al decirle a Jeb que “las torres gemelas cayeron durante el mandato de tu hermano. Recuerda eso”. Trump se refería a los atentados del 11-S, que tuvieron lugar cuando George W. Bush era presidente.
