Nayib Bukele asume este día la Presidencia de El Salvador con una economía debilitada por una baja recaudación fiscal, que ha llevado al país a endeudarse constantemente, y por la corrupción en los más altos niveles políticos.
La ceremonia de traspaso del Ejecutivo se llevará a cabo este sábado a las 9:00 am en la plaza Capital General Gerardo Barrios, en el centro de San Salvador, donde Salvador Sánchez Cerén terminará su periodo presidencial de cinco años; rompiendo la tradición de realizar la ceremonia en recintos cerrados.
Bukele dijo que junto a su esposa Gabriela Rodríguez -con quien espera a una niña, su primogénita- tenían “el honor de invitar al pueblo salvadoreño” al acto de asunción.
Lea: Seguridad y economía en El Salvador, los grandes retos de Bukele
El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, y la vicepresidenta del Consejo de Estado de Cuba, Gladys Bejarano, llegaron el jueves a El Salvador.
También fue recibido el viceprimer ministro de Belice, Patrick Faber, quien transmitió un saludo de parte de su pueblo y Gobierno, y señaló que es “un honor estar en la toma de posesión del nuevo presidente de El Salvador”.
Faber, Alvarado y Bejarano se unen al presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Brahim Gali, quien ya se encontraba en el país centroamericano.
A la posesión han confirmado también su asistencia los presidentes de República Dominicana, Danilo Medina; de Guatemala, Jimmy Morales, y de Panamá, Juan Carlos Varela. De igual forma estará el secretario general adjunto de la Organización de Estados Americanos (OEA), Néstor Méndez.
Lea también: Nayib Bukele, el polémico 'millennial' que gobernará El Salvador
Al traspaso de mando han sido invitadas 139 delegaciones diplomáticas y hasta ayer habían confirmado 66 países.
Una vista general del último ensayo de la ceremonia de toma de posesión del nuevo gobierno salvadoreño, liderado por Nayib Bukele.
|
La Policía desplegará unos 900 agentes que darán seguridad a todo el perímetro y 400 de ellos estarán exclusivos para cuidar la periferia de la plaza, donde se realizará la ceremonia.
Este contingente policial complementará a los militares que desplegará el Estado Mayor Presidencial de la Fuerza Armada en los accesos y en la plaza Barrios.
Economía
Bukele, empresario de 37 años, tendrá que gobernar lo que resta de 2019 con un presupuesto que necesitó una financiación extra de 1,297 millones para pagar vencimiento de deuda y cubrir gastos.
Este presupuesto es solo una muestra de la forma en la que Gobierno y Congreso han cubierto constantemente el hueco del déficit fiscal, sin tocar el sistema de recaudación que urge de una reforma.
Según e l Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), el país vive una crisis fiscal de “gran envergadura” por lo que ha propuesto a los políticos, incluido Bukele, buscar una reforma integral del sistema tributario.
Entre las medidas se incluye instaurar un impuesto al valor agregado (IVA) “diferenciado” para los bienes de lujo, aplicar impuestos ambientales y eliminar “privilegios fiscales injustificados”.
Pese a que los ingresos tributarios se han mantenido constantes, según los registros oficiales, estos han sido insuficientes para cubrir el gasto corriente del Estado.
Nuevamente el presupuesto actual sirve de ejemplo: los gastos presupuestados, a falta de la aprobación de 286 millones de dólares, son de 6,713,2 millones y la recaudación estimada es de 4,832,8 millones.
Esta situación tributaria le pasó factura a la administración saliente en 2016, cuando estuvo cerca de caer en el impago de sus obligaciones a corto plazo con los proveedores por una “crisis de liquidez” tras la baja en la recaudación de impuestos por unos $300 millones.
Con 20,742 kilómetros de extensión y 6.6 millones de habitantes, El Salvador depende en gran parte de las remesas enviadas por migrantes en el exterior, sobre todo Estados Unidos, que en 2018 sumaron 5,468.7 millones de dólares.