Ciudad de México.
Antecedentes como la reciente visita del candidato republicano Donald Trump a México y la posterior dimisión del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, son algunos de los hechos que debilitaron la imagen del presidente mexicano Enrique Peña Nieto, que anoche se aprestaba a dar el tradicional grito ante una multitud de personas en el Zócalo.
El grito de independencia, que se celebra la noche del 15 de septiembre, representa uno de los actos públicos donde el Presidente tiene mayor acercamiento con la ciudadanía. En los últimos tres años, cada vez que Peña ha salido al balcón del Palacio Nacional ha sido abucheado.
Este año, como estrategia para transmitir una imagen de austeridad, el presidente Peña Nieto canceló la tradicional cena de gala y las invitaciones a altos funcionarios, empresarios, artistas o deportistas e integrantes de la sociedad civil.
Fiesta en Centroamérica
Ayer, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica celebraron con coloridos desfiles, música y ferias los 195 años de su independencia de España, con la tarea pendiente de la unidad de la región en palabras del presidente de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén.
Los próceres que gestaron la independencia soñaron a Centroamérica “como una sola nación”, pero “esa tarea está pendiente”, a pesar los avances para superar los obstáculos que se anteponen a la unidad de los pueblos, aseguró el mandatario en un discurso alusivo a la fecha en la plaza Libertad de San Salvador.
Como “ejemplo de la hermandad”, Sánchez Cerén mencionó un plan trinacional que Guatemala, El Salvador y Honduras impulsan desde agosto para “erradicar” el crimen y la delincuencia en el denominado Triángulo Norte de Centroamérica.
Antecedentes como la reciente visita del candidato republicano Donald Trump a México y la posterior dimisión del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, son algunos de los hechos que debilitaron la imagen del presidente mexicano Enrique Peña Nieto, que anoche se aprestaba a dar el tradicional grito ante una multitud de personas en el Zócalo.
El grito de independencia, que se celebra la noche del 15 de septiembre, representa uno de los actos públicos donde el Presidente tiene mayor acercamiento con la ciudadanía. En los últimos tres años, cada vez que Peña ha salido al balcón del Palacio Nacional ha sido abucheado.
Este año, como estrategia para transmitir una imagen de austeridad, el presidente Peña Nieto canceló la tradicional cena de gala y las invitaciones a altos funcionarios, empresarios, artistas o deportistas e integrantes de la sociedad civil.
El presidente Peña nieto con el pabellón.
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Ayer, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica celebraron con coloridos desfiles, música y ferias los 195 años de su independencia de España, con la tarea pendiente de la unidad de la región en palabras del presidente de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén.
Los próceres que gestaron la independencia soñaron a Centroamérica “como una sola nación”, pero “esa tarea está pendiente”, a pesar los avances para superar los obstáculos que se anteponen a la unidad de los pueblos, aseguró el mandatario en un discurso alusivo a la fecha en la plaza Libertad de San Salvador.
Como “ejemplo de la hermandad”, Sánchez Cerén mencionó un plan trinacional que Guatemala, El Salvador y Honduras impulsan desde agosto para “erradicar” el crimen y la delincuencia en el denominado Triángulo Norte de Centroamérica.
De su lado, el presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, abogó por un país inclusivo y equitativo en donde a todos se les garanticen sus derechos.
Los mandatarios de Rusia, Vladimir Putin y Venezuela, Nicolás Maduro, enviaron sus felicitaciones a Nicaragua por la conmemoración de la independencia, mientras que el presidente estadounidense Barack Obama congratuló a Guatemala por la enmacipación.