La demócrata Maura Healey se convirtió este martes en la primera gobernadora abiertamente lesbiana de Estados Unidos, tras vencer en el estado de Massachusetts al republicano Geoff Diehl, apoyado por el expresidente Donald Trump, según varios medios.
Healy, de 51 años, ganó cómodamente a su rival y arrebata para los demócratas esta importante gobernación, que estaba en manos republicanas.
Casi el 90% de los candidatos LGBTQ que entraron en la contienda de las primarias son demócratas, como Maura Healey y Tina Kotek, quienes buscan convertirse en las primeras gobernadoras lesbianas en Massachusetts y Oregón, respectivamente.
“Ataques despiadados”
Healey lideró cómodamente la campaña, pero Kotek se mantuvo justo detrás de su rival en una apretada carrera de pronóstico reservado.
En Vermont, la candidata a la Cámara de representantes Becca Balint podría convertirse en la primera lesbiana que ese estado en llegar al Congreso.
Mary Louise Adams, autora galardonada y académica especializada en asuntos LGBTQ, saluda el progresivo impulso que asegura a los miembros de la comunidad “no solo presencia sino visibilidad y voz” en la vida pública.
“Como votante, me interesaría aún más saber cuáles son las plataformas generales de los candidatos y qué estrategias proponen para fortalecer y apoyar a las comunidades marginadas de todo tipo”, dice a la AFP esta profesora de la Universidad de Queen, en Canadá.
El número de candidaturas LGBTQ fue aclamado como un progreso significativo para un año en el que legisladores estatales propusieron un récord de más de 340 leyes anti LGBTQ, según Human Rights Campaign (HRC), el grupo a favor de los derechos gay más grande del país.
Buena parte de la legislación apunta a prohibir que niños transgénero participen en categorías deportivas con su género declarado o a evitar que se hagan presentaciones escolares que involucren números drag.
“Este año se aprobó en Alabama el paquete legislativo más antitransgénero de la historia y es alarmante como crecen los ataques a los jóvenes”, dice Cathryn Oakley, directora del estado en HRC para temas legislativos.
“También habla de la desesperación de nuestros oponentes. La opinión pública se ha movido tanto en la dirección de la igualdad que se han visto obligados a tratar de que la gente le tema a los niños”.