Esto pasó con Kasey Jones, una barista de 26 años que estaba recién llegada de Winsconsin y se había mudado a Nueva York. Se emborrachó una tarde y cuando trató de subir a su apartamento por la escalera de incendios, cayó al vacío.
Lo hizo desde un quinto piso. Esa noche había estado bebiendo en un techo. Y puso las fotos de cómo la pasó. Y lo peor: fotos de lugares altos desde los que ella tomaba fotografías hacia el piso.
En su último pie de foto decía: “Tomé montones de whiskey, así que alguien ayúdeme”. Murió y los vecinos solo oyeron la caída de su cuerpo al pavimento.
Su compañera de habitación solo lloraba por lo que pasó, reportó el portal Cosmopolitan.