Doce activistas a favor de los inmigrantes indocumentados, la gran mayoría mujeres, fueron detenidos hoy frente a la Casa Blanca en una protesta efectuada bajo el lema de 'ni una deportación más', en la que participaron más de mil personas, según los organizadores.
'Un alto a las deportaciones', gritó uno de los arrestados cuando lo llevaba esposado uno de los policías que custodiaba la verja frontal de la residencia presidencial, frente a la cual se congregaron los manifestantes para presionar al presidente Barack Obama a que detenga la expulsión de inmigrantes indocumentados.
Ver: Hondureños contra las deportaciones
Las detenciones se produjeron cuando los doce manifestantes, en un gesto de desobediencia civil, se negaron a desalojar el perímetro de seguridad establecido por la policía frente a la Casa Blanca y se mantuvieron sentados en el poyete inferior de la verja perimetral con los brazos entrelazados formando una cadena.
La presión al presidente Obama para que detenga las deportaciones se ha intensificado en las últimas semanas y hoy fueron cientos de manifestantes, provenientes de diferentes partes del país, los que alzaron su voz frente a la sede del poder ejecutivo.
Obama se encuentra en Filipinas, en la última etapa de una gira asiática que comenzó la semana pasada.
La convocatoria de la protesta estuvo a cargo del National People's Action (Acción Nacional del Pueblo), una red de 30 organizaciones comunitarias en 17 estados, y de la Alianza Nacional de Trabajadores Domésticas, que eligieron como lugar de concentración, como viene siendo habitual, el parque Lafayette, frente a la Casa Blanca.
En la protesta, los manifestantes corearon consignas mientras mostraban pancartas que pedían un alto a las deportaciones.
De manera simultánea, siete inmigrantes radicados en Georgia iniciaron esta mañana un ayuno frente a la Casa Blanca con el fin de presionar para que se ponga fin a las deportaciones.
La Red Nacional de Jornaleros se ha mantenido desde el 5 de abril con estas actividades en el mismo lugar.
Los activistas detenidos fueron identificados como: Eric Murillo, del Comité de Justicia Laboral; Guillermina Castellanos, de La Colectiva de Mujeres, de San Francisco (California); Iliana López, de Encuentro; Karina Muñiz, María Ibarra y María Hernández, de Mujeres Unidas y Activas, de San Francisco (California).
Asimismo, Carolina Hernández-Cordero, del grupo Sunflower Community Action; Nancy Arollo, de Colectiva de Mujeres, San Francisco (California); Sulma Arias-Mclelan, de Sunflower Community Action; Sonny P. Garcia, de Illinois People's Action; y Herminia Servant, de Casa de Maryland.
'A mi esposo lo agarró migración y esta en proceso de deportación. Yo le pido a Barack Obama que, por favor, pare eso; que ya no separe más familias', dijo a Efe Alma Hernández, del Centro Dominicano, de Boston (Massachusetts).
Carmen, de la organización Dreamers Moms y quien viajó de Orlando (Florida) a esta capital para sumarse a la manifestación, afirmó que su familia se siente amenazada por las autoridades migratorias.
'En mi familia he sufrido dos deportaciones y seguimos recibiendo amenazas de deportación. He vivido en carne propia el sufrimiento de la familia y por eso estoy aquí para luchar', dijo.
Rosario Castillo, quien dijo ser una de las organizadores de las activistas procedentes de Florida, mencionó que pese a residir y trabajar desde hace 25 años en Estados Unidos no ha podido regularizar su estatus migratorio.
'Para que las deportaciones se paren se necesita una reforma migratoria', agregó.
En junio de 2013, el Senado aprobó una reforma integral del sistema de inmigración, que incluye el refuerzo de la seguridad de la frontera con México y abre una vía para la adquisición de la ciudadanía para los indocumentados que residen en el país.
La Cámara baja, de mayoría republicana, se ha opuesto a analizar el documento del Senado en su totalidad y prefiere un enfoque por partes.
El estancamiento de la reforma migratoria en el Congreso ha llevado a las organizaciones proinmigrantes a elevar el nivel de presión tanto a los republicanos de la cámara baja como al presidente.
El Movimiento por una Reforma Inmigratoria Justa ha anunciado una nueva fase de activismo en la que intensificará sus movilizaciones para que se detengan las deportaciones.
Al Congreso le puso de plazo límite hasta el 28 de junio para la aprobación de la reforma inmigratoria, fecha en la que se cumple un año desde que el Senado aprobara la reforma inmigratoria.
Miembros de otras agrupaciones de la comunidad que han dicho verse afectados 'de manera directa por las crisis migratoria', tales como CASA, CARECEN, Bend the Arc: A Jewish Partnership for Justice, DC Jobs with Justice, anunciaron una movilización para el 1 de mayo.