En una visita a México, la secretaria de Estado de EUA, Hillary Clinton, abordó con su par mexicana, Patricia Espinosa, una extensa agenda que incluye la preocupación de Washington por la violencia del narcotráfico.
Clinton llegó ayer a Guanajuato donde estuvo unas seis horas antes de ir a Ciudad de México para reunirse con el presidente Felipe Calderón.
En Guanajuato, Clinton y Espinosa repasarán un amplio temario de la agenda bilateral, que incluye asuntos comerciales, la lucha contra el cambio climático, el desarrollo de la infraestructura en la frontera común y la colaboración contra el crimen organizado, según la Cancillería mexicana. El viernes, el Departamento de Estado había admitido, a través de su portavoz Philip Crowley, que la espiral de violencia que afecta a México “ciertamente es una amenaza a la seguridad nacional estadounidense”.
Cifras
La violencia derivada de la persecución a los carteles del narcotráfico alcanzó en 2010 un nuevo nivel récord en México, con más de 15,200 muertos, la cifra más alta desde que en diciembre de 2006 el presidente Felipe Calderón ordenó a los militares involucrarse en la persecución del crimen organizado.
Desde entonces se han registrado más de 34,600 muertos atribuidos a los carteles o a las operaciones para perseguirlos. Los carteles del narcotráfico ya operan desde el año pasado con coches bomba.