Pekín, China.
El iPhone es uno de los productos más emblemáticos del S.XXI pero se fabrica bajo condiciones del XIX. Es la denuncia el organismo China Labour Watch (CLW) tras investigar las instalaciones del proveedor norteamericano Jabil Circuit en la ciudad industrial de Wuxi.
En el complejo se fabrican las carcasas del teléfono en condiciones que incumplen las leyes laborales chinas, ya de por si permisivas. CLW asegura que aunque los trabajadores acumulan hasta 158 horas de horas extra (cuatro veces por encima del límite legal, establecido en 36 horas) no llegan a ganar el salario local medio.
El informe destaca las presiones a los trabajadores que, inluso, el último año, han visto empeorar sus circunstancias laborales. 'Los trabajadores de Jabil son forzados a trabajar incluso más horas extras que antes, en edificios que aún están en construcción, cayéndole encima de la línea de producción el techo de placas, y no les está permitido ni hablar ni mirar a otro punto que no sea su trabajo', señala el informe.
Ante los resultados de la investigación, la organización en defensa de los trabajadores cuestiona el compromiso de Apple y sus 'promesas públicas en relación a estándares laborales'. La denuncia se suma a la larga lista que han acumulado los proveedores de Apple en China sobre abusos laborales.
El iPhone es uno de los productos más emblemáticos del S.XXI pero se fabrica bajo condiciones del XIX. Es la denuncia el organismo China Labour Watch (CLW) tras investigar las instalaciones del proveedor norteamericano Jabil Circuit en la ciudad industrial de Wuxi.
En el complejo se fabrican las carcasas del teléfono en condiciones que incumplen las leyes laborales chinas, ya de por si permisivas. CLW asegura que aunque los trabajadores acumulan hasta 158 horas de horas extra (cuatro veces por encima del límite legal, establecido en 36 horas) no llegan a ganar el salario local medio.
El informe destaca las presiones a los trabajadores que, inluso, el último año, han visto empeorar sus circunstancias laborales. 'Los trabajadores de Jabil son forzados a trabajar incluso más horas extras que antes, en edificios que aún están en construcción, cayéndole encima de la línea de producción el techo de placas, y no les está permitido ni hablar ni mirar a otro punto que no sea su trabajo', señala el informe.
Ante los resultados de la investigación, la organización en defensa de los trabajadores cuestiona el compromiso de Apple y sus 'promesas públicas en relación a estándares laborales'. La denuncia se suma a la larga lista que han acumulado los proveedores de Apple en China sobre abusos laborales.