Washington, Estados Unidos. 'Levantar las restricciones
demasiado rápido podría provocar una
resurgencia mortal' de la
pandemia, advirtió el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS),el etíope Tedros Adhanom Ghebreyesus.
En el mismo sentido Christian Bréchot, expresidente en Francia del instituto nacional de investigación médica (Inserm), advirtió que 'hay que ser muy humilde con este virus porque ya nos hemos equivocado', en declaraciones a la radio France Info. A pesar de ellos varios países de
Europa, la región del mundo más afectada por la pandemia (más de
70,000 muertos) ya están anunciado el levantamiento parcial del
confinamiento.
Austria volverá abrir sus pequeños comercios después de Pascua, Dinamarca abrirá sus guarderías, escuelas infantiles y primarias el 15 de abril mientras que el gobierno checo ya aligeró sus reglas.
Estos países siguen los pasos de China, que el 8 de abril puso fina la cuarentena a en Wuhan, la ciudad epicentro del coronavirus, tras considerar que había vencido a la epidemia. Otros países de
Europa aplican un
confinamiento estricto, como el
Reino Unido, donde la epidemia golpea con violencia.
En Francia, el director general de Sanidad, Jérôme Salomon, solo ve un 'pálido rayo de sol' en la ligera caída de ingresos en los servicios de reanimación.
España e Italia, los países más duramente afectados, también parecen estar llegando al pico de contagios con cifras estables o en ligero retroceso.
Pero ambos gobiernos siguen en guardia: Italia prorrogó hasta el 3 de mayo el confinamiento general y España hasta el 25 de abril. Lo mismo pasa en Irlanda, Portugal y Bélgica.
En Francia el presidente Emmanuel Macron debería prorrogar el confinamiento de nuevo el lunes. 'Aunque se llegue al pico no hay que
'desconfinar' porque estas medidas han permitido evitar la congestión de los
hospitales', apunta el epidemiólogo Antoine Flahault.
Salir del confinamiento solo será posible más tarde 'cuando haya un descenso' del número de casos, asegura Flahault, director del instituto de sanidad global de la universidad de Ginebra (Suiza) en declaraciones a la cadena de televisión France 2.
Por su parte el investigador Christian Bréchot 'espera que a partir de mediados de mayo estaremos en una situación de desaceleración' que permita una 'distensión progresiva'.
'No vamos a pasar del negro al blanco sino del negro al gris, con la continuación del confinamiento, en particular para una parte de la población', indica Jean-François Delfraissy, presidente del consejo científico que asesora al gobierno francés sobre la epidemia. Según este experto hacen falta varias condiciones antes de poner fin al
confinamiento, la primera de ellas que caiga el número de casos de
COVID-19 en los servicios de reanimación de los hospitales.
El objetivo es que el personal médico pueda descansar tras el esfuerzo enorme de las últimas semanas y que lo s hospitales puedan reconstituir sus reservas de material y de productos médicos.
Además hay que esperar que disminuya la circulación del virus, con una tasa de transmisión (R) inferior a 1, lo que significa que una persona contaminada transmite de media el virus a menos de una persona (frente a las 3,3 personas del principio de la epidemia).
La tercera condición es que haya mascarillas suficientes para protegerse y tests para poder controlar la evolución del virus. Otra de las incógnitas sobre el
virus es el papel que tendrán los
sistemas electrónicos para detectar a
personas contaminadas.
Francia es prudente sobre la cuestión mientras Alemania espera poner en marcha una aplicación para teléfonos móviles, inspirada en lo que se hizo en Singapur, que permite el seguimiento individual y la identificación de las cadenas de contaminación. Vea: Cuba envía a Italia un segundo equipo médico para combatir el coronavirus Otra incógnita es si la
difusión del virus se frenará con la llegada del verano, como suele pasar con los
virus respiratorios.
Es lo que ocurre con la epidemia de gripe en el hemisferio norte, que suele detenerse en abril, pero no se sabe si ocurrirá lo mismo con el virus SARS-CoV-2.
La situación en Singapur, donde el virus ha vuelto en los últimos días con fuerza pese a las temperaturas de 30º, ponen en duda esta hipótesis.
'Si no hay freno estival, las cosas serán más complicadas' para salir del confinamiento, asegura el epidemiólogo Antoine Flahault.
En las próximas semanas, a medida que la pandemia de COVID-19 parece estabilizarse en algunos países, aumenta la presión para que los gobiernos pongan fin al confinamiento de la población pero los expertos apuntan que solo será posible con algunas condiciones.
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Riesgo de 'resurgencia mortal' del virus
En el mismo sentido Christian Bréchot, expresidente en Francia del instituto nacional de investigación médica (Inserm), advirtió que 'hay que ser muy humilde con este virus porque ya nos hemos equivocado', en declaraciones a la radio France Info.
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Concesiones
Austria volverá abrir sus pequeños comercios después de Pascua, Dinamarca abrirá sus guarderías, escuelas infantiles y primarias el 15 de abril mientras que el gobierno checo ya aligeró sus reglas.
Estos países siguen los pasos de China, que el 8 de abril puso fina la cuarentena a en Wuhan, la ciudad epicentro del coronavirus, tras considerar que había vencido a la epidemia.
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caída de ingresos
En Francia, el director general de Sanidad, Jérôme Salomon, solo ve un 'pálido rayo de sol' en la ligera caída de ingresos en los servicios de reanimación.
España e Italia, los países más duramente afectados, también parecen estar llegando al pico de contagios con cifras estables o en ligero retroceso.
Pero ambos gobiernos siguen en guardia: Italia prorrogó hasta el 3 de mayo el confinamiento general y España hasta el 25 de abril. Lo mismo pasa en Irlanda, Portugal y Bélgica.
En Francia el presidente Emmanuel Macron debería prorrogar el confinamiento de nuevo el lunes.
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Superar el pico de contagios
Salir del confinamiento solo será posible más tarde 'cuando haya un descenso' del número de casos, asegura Flahault, director del instituto de sanidad global de la universidad de Ginebra (Suiza) en declaraciones a la cadena de televisión France 2.
Por su parte el investigador Christian Bréchot 'espera que a partir de mediados de mayo estaremos en una situación de desaceleración' que permita una 'distensión progresiva'.
'No vamos a pasar del negro al blanco sino del negro al gris, con la continuación del confinamiento, en particular para una parte de la población', indica Jean-François Delfraissy, presidente del consejo científico que asesora al gobierno francés sobre la epidemia.
5
Condiciones previas
El objetivo es que el personal médico pueda descansar tras el esfuerzo enorme de las últimas semanas y que lo s hospitales puedan reconstituir sus reservas de material y de productos médicos.
Además hay que esperar que disminuya la circulación del virus, con una tasa de transmisión (R) inferior a 1, lo que significa que una persona contaminada transmite de media el virus a menos de una persona (frente a las 3,3 personas del principio de la epidemia).
La tercera condición es que haya mascarillas suficientes para protegerse y tests para poder controlar la evolución del virus.
6
Control electrónico
Francia es prudente sobre la cuestión mientras Alemania espera poner en marcha una aplicación para teléfonos móviles, inspirada en lo que se hizo en Singapur, que permite el seguimiento individual y la identificación de las cadenas de contaminación.
7
¿Freno en verano?
Es lo que ocurre con la epidemia de gripe en el hemisferio norte, que suele detenerse en abril, pero no se sabe si ocurrirá lo mismo con el virus SARS-CoV-2.
La situación en Singapur, donde el virus ha vuelto en los últimos días con fuerza pese a las temperaturas de 30º, ponen en duda esta hipótesis.
'Si no hay freno estival, las cosas serán más complicadas' para salir del confinamiento, asegura el epidemiólogo Antoine Flahault.