Juticalpa, Olancho, Honduras
En una concentración, la candidata del partido Libertad y Refundación (Libre), Xiomara Castro, cerró ayer su campaña para las elecciones del próximo domingo en Honduras.
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Castro dio por concluida su campaña en Juticalpa, tierra natal de su esposo, el expresidente Manuel Zelaya.
Reunidos en un campo de deportes en las afueras de la ciudad, decenas de miles de seguidores aclamaron a la candidata mientras blandían banderas rojinegras y lanzaban encendidas consignas.
En el acto se presentaron los candidatos que disputan un curul en el Congreso Nacional por Olancho.
En su discurso, Castro criticó a los gobiernos que impiden que “los pueblos tengan (...) justicia, paz y equidad” y prometió cambiar este modelo por otro que “dé respuesta a los hondureños”.
Recalcó como en sus anteriores discursos “una revolución pacífica pero democrática” que será construida a partir de una nueva Constitución, redactada por una Asamblea Nacional Constituyente. “Vamos a reconstruir una Honduras diferente para todos, con la reconciliación”.
“Necesitamos una Honduras diferente, donde podamos lograr una reconciliación porque una casa dividida no prospera”, insistió la presidenciable.
