El director general de la Unesco, Koichiro Matsuura, condenó hoy la muerte en los últimos días de seis empleados de medios de comunicación iraquíes, entre periodistas y otros profesionales, y las presiones que se ejercen sobre ellos.
Matsuura, tras citar en un comunicado los nombres de Khudr Yunis al Obaidi, Yassin Aid Assef y Falah Jalaf Al Diyali -asesinados a comienzos de mes-, dijo estar 'horrorizado por el número de periodistas iraquíes que pagan con sus vidas su compromiso profesional al servicio del derecho humano fundamental que es la libertad de expresión'.
También cargó contra 'las diferentes presiones ejercidas contra los medios de comunicación', y se refirió en concreto al secuestro del contable del periódico gubernamental 'Al Sabah', Akil Adnan Majid, el pasado día 9.
En ese sentido, recordó que seis informadores o empleados de medios de comunicación son rehenes actualmente de organizaciones que los han capturado.
El director general evocó la declaración adoptada a comienzos de enero en la conferencia internacional celebrada en la sede de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco, en París.
Según el texto de esa declaración citado por Matsuura, 'tanto los representantes del Gobierno como los profesionales de los medios de comunicación consideran esencial el papel de la prensa para la reconstrucción de Irak'.
También hubo consenso en la conferencia sobre 'la necesidad de buscar y llevar ante la justicia a los responsables de esos crímenes contra los periodistas', añadió el máximo responsable de la Unesco, que mostró su esperanza de que las autoridades locales 'cooperarán para que ese deseo se convierta en realidad'.
Según Reporteros sin Fronteras, 146 periodistas y otros trabajadores de medios de comunicación han sido asesinados en Irak desde el inicio de la guerra con la invasión de la coalición dirigida por Estados Unidos en marzo de 2003.