21/12/2025
07:33 PM

Tierra adentro

  • Actualizado: 27 enero 2007 /

Dejamos atrás la capital entre la calidez de su gente y la frescura de sus tardes para retomar la ruta y llegar a lo que fue la primer morada administrativa de Honduras, Comayagua.

Dejamos atrás la capital entre la calidez de su gente y la frescura de sus tardes para retomar la ruta y llegar a lo que fue la primer morada administrativa de Honduras, Comayagua.

El parque central es testigo del paso del tiempo con su principal aliado: el reloj más antiguo de América que por medio de campanadas da los cuartos de hora, las medias y las horas.

La pieza histórica, que no deja de andar desde 1636 en la iglesia de La Merced luce renovada en la fachada de la iglesia catedral desde el año de su fundación en 1711 conservando sus piezas originales construida por los Moros en el 1100.

Pero estos datos anclados por las fechas renacen con la vida de los hombres que han jurado amor eterno a sus trabajos ajenos a las condecoraciones y amarrados al compromiso infinito.

Blas Reyes, de 85 años, es el relojero por más de cinco décadas de esta máquina del tiempo y el único capacitado para repararla. Con rasgos orientales, Blas confiesa haber llegado a Honduras “embotellado en origen” desde China y después de unas maniobras que procuran arreglar el atraso del reloj con una pícara sonrisa pone las agujas en hora.

Salomón Cheves Flores de 84 años, quien es el campanero de la catedral hace 60 años se empeña en explicar la técnica del repique y las diferencias de las campanadas según anuncien un nacimiento, una muerte o la misa.

Al llegar a Siguatepeque la plaza se viste de Navidad y esa noche las luces se encienden dando comienzo a una época donde los sueños renacen.

/home/laprensa/imagenes/fotos/2006/interiores/15.jpg

La pareja rumbo a la comunidad de Sebastián de Colohete.

La ruta lenca

Iniciamos la Ruta Lenca desde Marcala dejando atrás el asfalto. Las montañas impregnadas de aroma a café nos acercan al color de sus hortalizas y la tradición de los lencas en las urdimbres de sus tejidos, alfarería y tradiciones ancestrales. Desde el Cerro Los Hoyos nos empapamos de misterio de la voz de nuestros guías, un grupo de niñitos, que nos acompañan al lugar insinuando que “esos huecos en la tierra los hicieron hace mucho tiempo los antiguos lencas para escaparse de los españoles”. Un sendero escoltado por brócolis sube el cerro coronado por una familia que recolecta los productos para ofrecer en el mercado del domingo.

Este es el día en que la montaña baja al pueblo con todos sus productos y donde el comercio no es otra cosa que una de las actividades tradicionales que forma parte de la cultura ancestral de los pueblos indígenas.

La misa aún no ha comenzado pero en la puerta de la colonial iglesia de La Esperanza aguarda una hilera de niñas y niños con ofrendas que varían desde una enorme papaya hasta un ramo de cartuchos para el altar.

San Manuel de Colohete aún lamenta la ausencia de la imagen de la Purísima, pero el pueblo conmemora esta fecha entre los rezos en el templo y la feria en sus calles llenas de ofertas y entretenimientos. La iglesia conserva en el altar Los Símbolos de Dioses ante de la conquista pertenecientes a los lencas como el Sol y la Luna que se encuentran entre sus pinturas originales.

/home/laprensa/imagenes/fotos/2006/interiores/16.jpg

Un grupo de niños lencas rodea uno de los tantos misteriosos agujeros del cerro de Los Hoyos en La Esperanza.

Desde Sebastián de Colosuca, nos dirigimos a la Cueva del Diablo, un conjunto de pinturas rupestres donde los antiguos habitantes demarcaron el lugar dibujando manos. En Erandique lo más precioso además del ópalo es su gente. Después de comprobarlo atravesamos la tierra multicolor, en la pequeña aldea de Barrio Nuevo. Kilómetros más adelante estábamos caminamos por “el barrial” en Nueva Esperanza, sitio de donde se extrae el material que las mujeres utilizan en la alfarería lenca en La Campa.

Gracias nos reconforta con sus aguas, nos enriquece con la historia de sus calles, el fuerte San Cristóbal y la vista del Celaque para iniciar una nueva ruta con nuevos paisajes y el encuentro con su gente.

Apuntes de la aventura

Estos son los pueblos y ciudades recorridas en esta etapa por Amunches Recorriendo América: Comayagua, Siguatepeque, Jesús de Otoro, La Paz, San Pedro de Tutule, Marcala, La Eperanza, Intibucá, Yamaranguila, San Marcos de Caiquín y Santa Cruz. Además, San Manuel de Colohete, La Campa, Gracias, Erandique, San Sebastián de Colosuca, Cubite, Corquín, Gracias, El rodeo de Quelacasque.

Países por recorrer:

El Salvador, Belice, Guatemala, México, EUA, Canadá y Alaska (julio de 2006). El camino de regreso: desde Alaska a Canadá, EUA por la costa Este, México y CA, Colombia, Venezuela, Guyanas, Surinam, Brasil, Uruguay, Paraguay, Chile y Argentina para finalizar en Ushuaia, el punto más austral del mundo en la Patagonia.

Patrocinadores

La travesía de German y Patricia no fuera posible si no contaran con el apoyo de empresas como: Diario LA PRENSA. También figuran Land Rover, Shell, Arcor, Proplan, Sony Cybershot, Bridgestone, Assist-Card y Terra.