El presidente de la comisión para asuntos religiosos, Ali Bardakoglu, aseguró ayer que no tiene intención de hablar con Benedicto XVI sobre las declaraciones que el pasado septiembre desataron la ira de los musulmanes.
“No quiero hablar de ese tema. Sobre él he dicho todo lo que tenía que decir. En vez de hablar del pasado, quiero hablar del futuro”, dijo Bardakoglu, que agregó que la petición de reunirse con el papa Ratzinger era anterior al discurso de Alemania.
Benedicto XVI en el mes de septiembre, en Regengurg, Alemania, citó unas palabras del emperador bizantino Manuel II Paleólogo en las que decía que en Mahoma sólo se veían “cosas malas e inhumanas, como su orden de difundir usando la espada la fe que él predicaba”, mientras que el Corán proclama “ninguna obligación en las cosas de la fe”.
Tras el escándalo originado, el Papa dijo que sus palabras habían sido malentendidas y expresó su “respeto más profundo por el Islám.
Islam
Sin embargo, grupos islámicos y dirigentes de países musulmanes no aceptaron las explicaciones y exigieron que cancelara el viaje.
Algunas de las críticas más duras llegaron de la misma Turquía, país donde el Papa es visto con recelo desde antes de su elección, porque se manifestó en contra a su entrada en la Unión Europea.
En una entrevista Bardakoglu dijo que el Papa no se había disculpado apropiadamente tras su discurso debido a la creencia católica de la infalibilidad del obispo de Roma.
Protestas
Un grupo de un centenar de personas, entre nacionalistas e islamistas, protestaron ayercontra la visita a Turquía del Papa Benedicto XVI, la próxima semana, con un rezo simbólico en el museo de Santa Sofía, uno de los monumentos más famosos de Estambul.
Los manifestantes irrumpieron en el museo, que originalmente fue una catedral, luego fue convertida en mezquita y finalmente en museo, y rezó al modo musulmán como protesta por la visita del Pontífice.
La policía detuvo a algunos manifestantes después de que el grupo gritase consignas contra el Papa dentro de Santa Sofía.
Los congregados dijeron pertenecer al Alperen Ocaklari, organización juvenil del Partido de la Gran Unidad, de tendencia islámico-nacionalista.
El Partido de la Felicidad turco ha convocado para el próximo domingo una gran manifestación en una plaza de Estambul para mostrar su oposición a la visita de Benedicto XVI.