'Si Dios quiere regreso en la tarde para estar con mi familia' fueron las últimas palabras que dijo el empresario hondureño de la construcción Plutarco Molina a los empleados de aeropuerto antes de tomar el vuelo 731 que se estrelló hoy en el Cerro de Hula, del municipio de Santa Ana, en el departamento de Francisco Morazán, centro de Honduras.
La joven Iveth Torres, comentó que el arquitecto estuvo hablando de su familia y hasta leyó la Biblia antes de abordar la aeronave. Comentó que era un cliente agradable por lo que la tristeza también invadió a quienes lo atendían.
La muerte de Molina ha causado gran consternación en la sociedad sampedrana, él era miembro de la Cámara de la Construcción de Honduras. La víctima de esta tragedia aérea también era socio de la Constructora William & Molina junto al ex regidor de la municipalidad de San Pedro Sula, William Hall, que escribió en su Facebook tras conocer la noticia 'Qepd mi amigo y hermano Plutarco'.
Molina Participó en varias ferias internacionales representando a Honduras. Sus amigos del sector de la construcción lo recuerdan como un excelente profesional de la arquitectura. Pertenecía al grupo de Catecumenado de la Parroquia San Vicente de Paúl; fue un hombre entregado a Dios, a su familia y su trabajo.
Viceministro
En el accidente también pereció el actual viceministro de la Secretaría de Obras Públicas, Transporte y Vivienda, Soptravi. Rodolfo Rovelo Lanza era ingeniero civil, de 60 años, estaba casado y tenía dos hijos.
Era amplia su trayectoria trabajando en los gobiernos del país, en obras como pavimentación de carreteras. Hizo varias consultorías para proyectos de alcantarillado y carreteras, entre otros. Era miembro del Colegio de Ingenieros Civiles de Honduras.
Además, supervisó varios proyectos ejecutados por el Fondo Hondureño de Inversión Social. Era gerente general de la Ingeniería Mero S. de R. L.
Rovelo también fue docente universitario de la carrera de Ingeniería Civil en Tegucigalpa.
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