San Pedro Sula, Honduras.
Las personas que tienen más riesgo de sufrir un accidente laboral son quienes operan con maquinaria pesada y en construcción, sobre todo cuando no cuentan con las medidas de protección necesarias.
Así lo indica Susana Pineda, encargada del Servicio de Medicina Ocupacional de la Secretaría regional de Trabajo, quien informó que mensualmente reciben de 18 a 20 trabajadores que han sufrido accidentes en sus centros de trabajo; es decir, más de 200 al año.
La unidad de Evaluación de Riesgos Profesionales, encargada del trámite legal administrativo de los trabajadores, define dos tipos de afectaciones: accidentes de trabajo y enfermedades causadas por la función que cumplen.
Entre los percances laborales más frecuentes están los de manos y dedos.
Las enfermedades más comunes son -en su mayoría- tendinitis (inflamación de un tendón debido a un golpe o esfuerzo excesivo) y el síndrome del túnel carpiano en ambas manos (dificultad de movilidad desde el antebrazo hasta la mano). La ley laboral incluye los accidentes de trabajo en trayecto, los cuales se tienen en el camino a los centros. Pineda indica que quienes más sufren por esta causa son los que se conducen en motocicleta.
“ El 90% de las personas llega a feliz término y a acuerdos con los trabajadores. El 10% restante lo representan, en su mayoría, las empresas de seguridad, sobre todo porque a los empleados se les disparan las armas y se hieren pies, pierna o brazos”.
El departamento de Estadísticas del Seguro Social registró 258 atenciones por accidentes de trabajo en Emergencia y 46 en Consulta Externa, pero no todos acuden a la Secretaría debido a que llegan a acuerdos directos con las empresas, además de las incapacidades temporales.
La Ley establece que cuando un trabajador que no esté asegurado sufra un riesgo de trabajo, el patrono estará obligado a pagar los costos por la atención médica.
En tanto, quienes sufran un riesgo profesional tendrán derecho a asistencia médica y quirúrgica, administración de medicamentos e indemnización.
Las personas que tienen más riesgo de sufrir un accidente laboral son quienes operan con maquinaria pesada y en construcción, sobre todo cuando no cuentan con las medidas de protección necesarias.
Así lo indica Susana Pineda, encargada del Servicio de Medicina Ocupacional de la Secretaría regional de Trabajo, quien informó que mensualmente reciben de 18 a 20 trabajadores que han sufrido accidentes en sus centros de trabajo; es decir, más de 200 al año.
La unidad de Evaluación de Riesgos Profesionales, encargada del trámite legal administrativo de los trabajadores, define dos tipos de afectaciones: accidentes de trabajo y enfermedades causadas por la función que cumplen.
Entre los percances laborales más frecuentes están los de manos y dedos.
Las enfermedades más comunes son -en su mayoría- tendinitis (inflamación de un tendón debido a un golpe o esfuerzo excesivo) y el síndrome del túnel carpiano en ambas manos (dificultad de movilidad desde el antebrazo hasta la mano). La ley laboral incluye los accidentes de trabajo en trayecto, los cuales se tienen en el camino a los centros. Pineda indica que quienes más sufren por esta causa son los que se conducen en motocicleta.
“ El 90% de las personas llega a feliz término y a acuerdos con los trabajadores. El 10% restante lo representan, en su mayoría, las empresas de seguridad, sobre todo porque a los empleados se les disparan las armas y se hieren pies, pierna o brazos”.
El departamento de Estadísticas del Seguro Social registró 258 atenciones por accidentes de trabajo en Emergencia y 46 en Consulta Externa, pero no todos acuden a la Secretaría debido a que llegan a acuerdos directos con las empresas, además de las incapacidades temporales.
La Ley establece que cuando un trabajador que no esté asegurado sufra un riesgo de trabajo, el patrono estará obligado a pagar los costos por la atención médica.
En tanto, quienes sufran un riesgo profesional tendrán derecho a asistencia médica y quirúrgica, administración de medicamentos e indemnización.
