La fiscal especial de los Derechos Humanos, Sandra Ponce, anunció ayer su retiro voluntario del Ministerio Público.
Después de 17 años de formar parte de la Fiscalía, Ponce decidió buscar otro camino para consolidar su vida profesional. Así lo confesó ayer en un diálogo con varios periodistas que cubren la fuente del MP.
“Creemos que lo mejor es hacernos a un lado”, dijo.
Expuso que en fecha reciente le comunicó al fiscal general Luis Rubí su intención de dejar sus labores como fiscal del órgano acusador del Estado.
“Ya le comuniqué que he considerado pedir el retiro. No lo he hecho formalmente, pero es una decisión tomada”, reveló la fiscal.
Asimismo le recomendó que pensara buscar a la persona que la sustituirá en el cargo. Como respuesta, Rubí le indicó que se lo hiciera saber por escrito, por lo que la presentará en los próximos días. Sus derechos laborales le serían reconocidos.
