El caudal del río Jila, que cruza por el municipio de Cabañas, ha deteriorado las bases de una plancha-puente construida para dar paso a 27 comunidades productoras de café y granos básicos.
Las autoridades y pobladores exigen al Gobierno una respuesta inmediata a esta problemática, que de no resolverse amenaza con incomunicar la zona.
El caudal de este río aumenta su nivel con las lluvias, las crecidas han dañado las viviendas que se encuentran en los alrededores.
Los vecinos se preocupan pues el único medio seguro para transitar es un puente de hamaca, el cual es utilizado para transportar en bestias granos básicos y café cuando la plancha es imposible de cruzar.
“Queremos atención del Gobierno. Llevamos 20 años de estar incomunicados, la plancha que nos construyeron solo duró seis meses”, aseveró el alcalde de Cabañas, Napoleón Mata.
Ayuda
Algunos estudios efectuados por cooperantes alemanes determinan que si no se toman las acciones necesarias, el río Jila podría hacer desaparecer al municipio de Cabañas en época de invierno.
Los daños que causa el río Jila afectaron a los vecinos de Cabañas, quienes temen quedar incomunicados.
La Comisión Permanente de Contingencias, Copeco, prometió intervenir en la situación pero hasta el momento no tiene respuestas concretas al planteamiento de los pobladores.
Se espera que el Gobierno, a través del presidente Manuel Zelaya Rosales, otorgue el presupuesto de cinco millones 800 mil lempiras para construir un puente con infraestructura que garantice un paso seguro en el lugar.
Cifra
8 mil habitantes
Serían los afectados si quedara incomunicada la zona debido al fuerte caudal del río.