El director de la Policía Nacional, comisionado Gustavo Sánchez, informó en las últimas horas que durante los próximos días se anunciará la recontratación de al menos 2,000 agentes. Entre ellos, estarían varios depurados durante la administración gubernamental de Juan Orlando Hernández (2014-2022).
Entre depurados, también se integrarían algunos oficiales retirados y otros en proceso de graduación en el Centro de Estudios Policiales, el ente formativo de la entidad policial.
“En los próximos días vamos a estar anunciado la recontratación de dos mil funcionarios más de manera inmediata, para que vengan a fortalecer nuestra institución y todas las acciones que estamos implementando, pero eso es aparte de los que estamos formando en el centro de estudios”, describió Sánchez.
DEPURACIÓN MASIVA
Una de las primeras medidas de Juan Orlando Hernández como presidente, durante su primer mandato, fue ordenar un proceso de depuración policial. La descripción del proyecto destacaba la “limpieza” de la institución por vínculos de agentes con el crimen, especialmente con el narcotráfico.
Entre los años 2016 y 2019, la Comisión Depuradora de la Policía Nacional de Honduras evaluó a más de 13,500 miembros de la carrera policial, lo que permitió excluir del servicio a cerca de 6,000 oficiales y agentes por diversos motivos, entre ellos la reestructuración, el retiro voluntario y el despido por justa causa.
La Comisión Depuradora de la Policía fue conformada por diferentes representantes de la sociedad civil: Omar Rivera, Alberto Solórzano y Vilma Cecilia Morales.
Uno de los depuradores aseguró en su momento que el principal problema que tuvo la Policía para que se convirtiera en una de las instituciones más corruptas del país es que “la impunidad campeaba y se cometía delito, pero no se investigaba ni se castigaba”.
ANÁLISIS DE REINTEGRO
Migdonia Ayestas, directora del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), opinó que “se debe hacer un análisis a cada uno de los uniformados que fueron depurados y si cumplen con los requisitos que los reintegren”.
Extendió al respecto: “Si analizamos que la depuración de la policía fue perfecta entonces sería un problema que sean reintegrados, pero si analizamos que hay muchos de los uniformados que separaron de sus cargos eran honestos y honrados que amaban a la institución policial y salieron depurados por este procedimiento”.
Por su parte, Leandro Osorio, excomisionado policial depurado, aplaudió la medida tomada por las autoridades hondureñas y el alto mando policial de reintegrar a efectivos de esa institución que fueron, a su criterio, destituidos “de manera irregular bajo el argumento de una restructuración”.
