24/04/2024
03:08 PM

Los ninis, expuestos a la delincuencia y la migración

Si no se hacen acciones orientadas a dar empleo y educación, aseguran expertos, los casi un millón de niños y jóvenes que no estudian ni trabajan pueden caer en redes de violencia.

Tegucigalpa

La falta de oportunidades laborales y educativas en el país han hecho que el número de niños y jóvenes que no estudian ni trabajan (ninis) aumente.

Esa población, que de acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) hasta mediados de 2022 era de 982,061 personas de entre 12 y 30 años, al no tener acceso a un trabajo o a educación, está en riesgo de caer en manos del crimen organizado y la delincuencia, coinciden analistas a LA PRENSA.

Ante eso, los expertos opinan que es necesario crear las condiciones, a través de políticas públicas y acciones concretas, que vayan orientadas a insertar al mercado laboral y al sistema educativo a ese gran número de hondureños.

Causas

Entre las principales causas del porqué ese casi millón de niños y jóvenes están en esa condición, Allan Cruz, director del programa Futuros Brillantes, de Visión Mundial Honduras, considera que se debe a la pobreza.

“Un hogar que antes no era pobre y que bajó su nivel de pobreza se ve obligado a mandar a todos sus miembros al mercado de trabajo, es decir, dejan sus estudios y buscan un empleo, pero al tener pocas oportunidades laborales se dedican a quehaceres de subsistencia”, dijo.

De los 982,000 ninis que hay, aproximadamente unos 570,000 están con intención de migrar, en actividades ilícitas, trabajos de subsistencia, trabajo oculto, labores domésticas no remuneradas o subremuneradas, sobre todo un alto porcentaje de niñas, estableció el analista.

“Si no estudian ni trabajan lo primero que puede ocurrir es que sean captados por las redes de violencia, el segundo es que puedan migrar de forma irregular, lo tercero es que entren en problemas de drogadicción o de algún tipo de problema social”, dijo.

De esos 570,000, hay un 30% que recibe ayuda económica de sus padres, que viven fuera del país, por lo que no consideran necesario tener un trabajo o un estudio.

Dato

De los 41,000 empleos que se daban a través de la Ley de Empleo por Hora, un gran porcentaje se perdió tras la derogación de la normativa, señala el Cohep. Además, establece que para mejorar la situación del desempleo se requiere que cada año se creen unos 150,000 nuevos puestos de trabajo.

Agregó que en muchos casos el mercado laboral no está dando oportunidades por factores como la colonia donde vive, la edad, la falta de formación y las habilidades para el puesto de trabajo.

Respecto a la educación, Cruz explicó que hay unos 400,000 menores que el sistema expulsó entre 2020 y 2022 porque no tuvieron acceso a las clases virtuales.

Aunque este año se espera que más niños ingresen al sistema educativo, estima que unos 120,000 no podrán regresar, “porque sus condiciones de pobreza y de exclusión hicieron una incidencia muy fuerte”.

Poca inversión

Para el sector privado, el clima de inversión, así como las condiciones que afectan la sostenibilidad en los negocios están limitando la creación de empleo, lo que dificulta aún más las oportunidades para los jóvenes.

Santiago Herrera, gerente de Política Económica del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), expresó que con la derogación de la Ley de Empleo por Hora el problema se agudizó.

“La Ley de Empleo por Hora era una oportunidad para que los jóvenes trabajen y estudien, y que pudieran generar un ingreso complementario a sus hogares, pero se derogó y no se planteó una alternativa”.

Añadió que el país tiene una alta tasa de población joven que cada año debe ser insertada al mercado laboral; sin embargo, no hay capacidad de las empresas para absorber esa fuerza de trabajo.En la agricultura hay más oportunidades laborales, pero muchos de los jóvenes no les gusta trabajar en el agro.

Además

570,000 Niños y jóvenes piensan en salir del país, o ingresan a actividades de subsistencia para generar ingresos.

Tal es el caso del sector caficultor, que en esta temporada de corte (de noviembre a marzo) genera al menos 100,000 puestos de trabajo; sin embargo, la condiciones de trabajo no les gusta, indicó Fredy Pastrana, coordinador de productores independientes de café.

Aunque desde los gobiernos se han hecho iniciativas para dar acceso al trabajo y al estudio a esa gran población de niños y jóvenes, las estrategias no han tenido los resultados esperados.La nueva administración trabaja en la creación de una política nacional de empleo.

LA PRENSA intentó hablar con la directora de Empleo de la Secretaría de Trabajo, Ingrid Amador, para conocer más sobre la nueva política; sin embargo, dijo que no podía hablar sin tener la autorización de la ministra Sarahí Serna.