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Misa por la reconcialición de los hondureños

  • 26 enero 2010 /

El presidente electo, Porfirio Lobo Sosa junto a su esposa Rosa e hijos participan de la eucaristía ofrecida en la Basílica de Suyapa para lograr la reconciliación nacional de Honduras.

    El presidente electo, Porfirio Lobo Sosa junto a su esposa Rosa e hijos participan de la eucaristía ofrecida en la Basílica de Suyapa para lograr la reconciliación nacional de Honduras.

    El obispo de Tegucigalpa Juan José Pineda llamó a los hondureños a servir a nuestra Honduras abriendo las puertas a la reconciliación. En la misa también se encuentran el presidente del Congreso Nacional, Juan Orlando Hernández y el próximo secretario de Seguridad, Óscar Álvarez.

    El religioso llamó a la reconciliación del pueblo hondureño sin importar las ideas políticas y las creencias religiosas y también abogó por el perdón de todos los ciudadanos sin importar quién es el ofensor.

    Según el sacerdote el objetivo para que haya una unidad, reconciliación y paz entre los hondureños es saber perdonarse, y “el perdón está al alcance de tu mano, una mano que se alarga, que edifica, que levanta, que está al alcance de tu mirada de poder encontrarte cara a cara con tu hermano y no tener miedo de bajarle la vista, porque el que nada teme nada debe”.

    Pineda señaló que “para poder perdonar hay que prepararse, en las mismas sagradas escrituras encontramos un camino de reconciliación humana, para poder perdonar a tu hermano 70 veces 7 recógete en oración”.

    El padre Pineda aseguró que Dios es magnánimo porque su misericordia no se puede explicar por la grandeza que hay en ella. “Muchos hemos experimentado esa misericordia cuando nos ama y nos perdona”.

    “Porque perdonar 70 veces 7, no significa que hay que perdonar 490 veces, no 70 veces 7 significa que hay que perdonar siempre”, explicó.

    Recordó que pese a que “todos sabíamos que en nuestro país había problemas fue extraordinario encontrarme con miles de hondureños que querían ser parte de la solución política”.
    “Para que haya reconciliación, paz y unidad en Honduras, tenemos que evangelizarla. Hay que predicar a Jesucristo porque con él todo es más bello y noble”, expresó.

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