19/04/2024
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Médico hondureño alcanza sus sueños en la industria de cruceros recorriendo el mundo

  • 09 junio 2022 /

Diego Alejandro Núñez cuenta que los cruceristas lo que más le solicitan es botox y rellenos faciales.

San Pedro Sula, Honduras

Después de pasar desvelo, aguantar hambre y muchas noches de lágrimas para graduarse de médico en Cuba, Diego Alejandro Núñez ahora siente que cumple sus sueños: trabajar como médico en un crucero de la compañía Carnival Cruise Line.

Diego, originario de Tegucigalpa, a los 14 años migró a Choloma, Cortés, con su familia en busca de nuevas oportunidades de trabajo. Estudió en el Instituto Primero de Mayo de San Pedro Sula, luego en 2006, ingresó a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras en el Valle de Sula (Unah-vs) tratando de buscar una carrera universitaria.

“Mi deseo siempre fue estudiar medicina y llegar un gran médico humanista, pero lamentablemente mis padres no podían darme ese privilegio ya que éramos de escasos recursos, así que opté por buscar otra carrera muy distinta, Ingeniería Química, aunque no era mi pasión”, explicó el joven médico de 34 años.

“Pero ya había germinado en mi el deseo de superarme bajo cualquier circunstancia, así que comencé a trabajar en la mañana como cajero en un banco de San Pedro Sula para poder tener ingresos, y por las noches iba a la Universidad. Salía cansado a tomar el transporte público para poder llegar a casa y comenzar una nueva rutina”, contó.

Después de tres años consecutivos intentando perseguir su sueño de ser médico, logró conseguir en el último año, una beca para poder estudiar medicina en Cuba. “Estuve lejos de casa, de mi familia, amigos, de mi cultura, para perseguir ese sueño. Conseguí mi meta y me gradué en el año de 2015 de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM)”.

Posteriormente regresó a Honduras a cumplir con el servicio social. “Pase por muchos lados, aldeas de la montaña del Merendón y hospitales regionales. En los años posteriores, trabajé apoyando brigadas médicas, junto a brigadistas internacionales en zonas remotas de Honduras, pero mi deseo de seguir adelante y llegar más alto no se quedó ahí. También colaboré en primera línea durante la pandemia del coronavirus en las zonas más recónditas del departamento de Copán. Además de desplazarse hasta donde se encontraban pacientes embarazadas y crónicos en medio de tempestuosas lluvias y calles llenas de lodo”, relató.

Un día la situación laboral se complicó en el país, pero una gran oportunidad tocó a su puerta. “La posibilidad de trabajar como médico en un crucero por distintas partes del mundo, estaba viviendo el sueño de cualquier hondureño: viajar por todas partes haciendo una labor tan bonita como es ayudar a las demás personas”.

Diego Alejandro Núñez en San Francisco, California.

¿Cómo fue el proceso hasta convertirse en médico de crucero?

Fue un proceso por el que tuve que atravesar diferentes entrevistas con expertos en el rubro de la medicina estética, algunos exámenes de inglés, incluyendo exámenes médicos que tuve que irme a realizar en Nicaragua porque así lo requería la compañía. Fue un proceso que al inicio cualquiera se decepcionaría porque eran bastantes requisitos pero nunca opté por rendirme ya que contaba también con muchísimo apoyo sentimental y económico de una persona muy importante en mi vida que me acompañó en todo momento y en varios de mis éxitos profesionales en los últimos años.

Fue una oportunidad que Dios me puso en el camino, muchas veces por diferentes situaciones creemos que el mundo se nos viene abajo pero, la perseverancia y la paciencia hace que podamos lograr todo lo que pedimos a Dios y Él lo concederá.

¿Qué distingue a los hondureños de otras nacionalidades en esos campos laborales?

Sabemos que como hondureños trabajamos comprometidos y responsables para poder servir a los demás, la carisma, la hospitalidad y el buen trato nos caracteriza.

¿Qué son las emergencias que atiende en un viaje?

A bordo de los cruceros me desempeño en el área de la medicina estética no quirúrgico. Realizó tratamientos antienvejecimiento inyectables, y tratamientos de adelgazamiento no invasivos.

¿Qué más hace de medicina estética en el crucero?

Realizo tratamientos faciales inyectables tipo botox y dysport para arrugas, thermage, criolipolisis, además de microneedling y rellenos faciales con ácido hialurónico.

¿Qué es lo que más le solicitan los cruceristas de cosmetic treatments?

Botox y rellenos faciales.

¿Cómo es una clínica dentro de un crucero?

Las clínicas de este tipo a bordo de los cruceros son muy completas y llenas de amenidades, cuento con todo el equipamiento e insumo necesario para realizar los procedimientos. Lo más espectacular es la vista al mar o a los diferentes paisajes mientras uno realiza los procedimientos, cabe mencionar que todos los procedimientos realizados a bordo cumplen con todos los requisitos sanitarios que establecen las leyes marítimas.

¿Cuál es su objetivo ahora que alcanzó ese cargo?

Mi principal objetivo es crecer en esta área de la medicina para ayudar a las personas a sentirse mejor con ellas mismas sin importar su raza, nacionalidad, religión u orientación.

¿Va a seguir en los cruceros o si prefiere trabajar en hospital?

Esta es una industria muy bonita, uno tiene la oportunidad de conocer el mundo y al mismo tiempo ayudar a las personas a sentirse mejor con su apariencia física cuando se ven en el espejo.

Con la ayuda de Dios pienso expandirme en un futuro y tener mi propia clínica estética en Honduras.

El médico hondureño en uno de sus viajes.

Anécdota en el crucero

En una ocasión nos tocó atravesar una tormenta, el barco se movía como si hubiera un sismo, la mayoría de los huéspedes y compañeros sufrieron de mareos por el movimiento, las cosas caían por todos lados, y ese día tenía que hacer un tratamiento. Gracias a Dios el clima mejoró para poder hacer el tratamiento, sino hubiese sido toda una hazaña inyectar el rostro con tales sacudidas, al final todo salió bien.

Remuneración

Las ganancias son en base a comisiones pagadas en Dólares, esta es un área que se relaciona mucho con las ventas, por lo tanto entre mejor ofrece sus servicios mas altas serán las ganancias que recibirá.

¿Cómo hizo para que le reconocieran el título?

La compañía reconoce la mayoría de títulos de universidades a nivel mundial, siempre y cuando sean médicos con certificación en su país de origen y con mínimo de 2 años de experiencia en cualquier ámbito de la medicina.

¿Cuánto tiempo lleva trabajando en el crucero?

Tres meses en total para un lapso de siete a nueve meses, además de gozar de una semana de vacaciones por cada mes trabajado al final de cada contrato.

El crucero va para Alaska

Si ahorita vamos navegando, es un recorrido de siete días y se repite. Sale de Seattle, Estados Unidos, llega a los glaciares en Alaska el miércoles, luego va Icy Strait Point (donde está el canopy más largo del mundo), después vamos para la capital de Alaska (Juneau) y a otra ciudad que se llama Ketchikan. Posteriormente vamos bajando, de regreso nos detenemos en Victoria, Canadá, y se vuelve a Seattle nuevamente.

El crucero que en su mayoría es tripulado por asiáticos, filipinos, indonesios, chinos, tailandeses hará este mismo recorrido por dos meses más y en septiembre vamos para Australia, atravesaremos todo el Pacífico en un viaje de 21 días, parando en Hawái, Islas Fiji, Nueva Zelanda y luego Sídney.

Foto de los glaciares en Alaska.