El nuevo Gobierno tiene el compromiso de mejorar la economía de los hondureños, que en la gestión Zelaya se hundió a niveles alarmantes. La descentralización será fundamental; se promoverán nuevas inversiones con el concurso de las autoridades comunales.
“Se buscará crear zonas de desarrollo económico con los pobladores”, indicó el empresario Mario Canahuati.
A la fecha se garantizan alrededor de nueve mil nuevas fuentes de trabajo luego de tener pláticas con maquiladores y otros inversionistas.
La iniciativa que impulsará Porfirio Lobo Sosa en su gobierno es la economía social de mercado, con la participación de la comunidad para mejorar la calidad de vida.
Tratarán de incrementar las exportaciones, disminuir la dependencia de la energía térmica, aprovechar y administrar los bosques, proyectar e incentivar el país en turismo, fomentar el desarrollo territorial del sector agropecuario, impulsar microempresas y fortalecer la educación y la salud.
El diálogo nacional y el reconocimiento internacional facilitarán la reactivación económica y la generación de oportunidades.
En el caso del bono de diez mil lempiras para familias pobres, que busca incentivar la educación de los niños, se deberán cumplir requisitos que se publicarán próximamente.
Para este beneficio se invertirán unos seis mil millones. “La responsabilidad de sacar al país adelante es de todos los hondureños”, añadió.
