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06:22 AM

La lenta entrega de cuerpos alarga agonía de parientes

  • 21 diciembre 2019 /

Familiares habían comprado regalos y les iban a llevar comida para compartir durante el 24 de diciembre, pues ese día les permiten visitas.

SAN PEDRO SULA.

“A las 3:27 de la tarde del viernes, antes de que lo mataran, hablamos con él por videollamada, todo estaba tranquilo y me dijo que estaba alegre porque iba a ver a su hija el 24 de diciembre”, relató ayer afuera de la morgue Yurani Rosales, esposa de Wuillians Randolfo Romero Soto, quien es una de las 18 víctimas de la masacre ocurrida en el Centro Penal de Tela.

Con su hija de dos años en brazos, Yurani esperaba con dolor la llegada de los cuerpos a la morgue de Medicina Forense de San Pedro Sula, pero con la esperanza de poder identificar el de Wuilliams y que se lo entregaran rápido.

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cuerpos fueron los primeros en ser llevados a la morgue de Medicina Forense de San Pedro Sula, adonde los equipos de forenses esperaban para realizar las autopsias y hacer los procesos de identificación de cada una de las víctimas del penal de Tela.
Mientras esperaba, comentó que su compañero de hogar tenía dos años de estar preso y en marzo de 2020 iba a juicio por portación ilegal de arma y robo.

“Como el trámite para obtener un carnet de visita lleva tiempo, no lo mirábamos desde hace tres meses, pero antes de esta tragedia hablamos con él”, confesó.

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“Mi hija ya no lo verá más, ni por videollamada, quería que saliera libre y tuviera la oportunidad de verla crecer”, dijo la mujer.

“Es una tristeza, estamos sufriendo y no sabemos qué fue lo que pasó”: Laura Connor,
Madre de víctima

Al lado de Yurani, quien estaba sentada en la banca de cemento afuera de la morgue, poco a poco se fueron sentando otros familiares que esperaban que los carros que salieron de Tela llegaran con los cadáveres.

La mayoría de las víctimas tenían delitos de robo, tentativas de robo, portación ilegal de armas, así como homicidios. Solo tres estaban sentenciados.
Sus rostros tristes se combinaban con cansancio, pues durante toda la noche estuvieron esperando que les dijeran que sus parientes no estaban entre los muertos.

“Vivimos en zozobra porque ellos están presos y les ayudamos, pero en nuestros corazones siempre tenemos esperanzas de verlos libres, no muertos”, dijo María Ángela López, pariente de una de las víctimas.

Foto: La Prensa

Esposas, madres, abuelas y hermanas de las víctimas relataban los planes que tenían con sus familiares para Navidad y cuando salieran libres, pues muchos no tenían delitos con penas graves.

Llegada

A eso de las 10:00 am, un vehículo forense llegó con siete de las víctimas, pero los parientes que estaban afuera aún no podían saber si eran los suyos.

Madres, hermanas y abuelas llegaban llorando a la morgue pidiendo información para retirar los cuerpos.

Pero el trámite para la identificación de cada uno de los fallecidos era lento, pues según se confirmó las huellas dactilares tenían que compararlas con los padrones que enviaría el Registro Nacional de las Personas.

Foto: La Prensa

El cansancio y la incertidumbre embargan a los familiares de las víctimas del penal de Tela que llegaron a la morgue de Medicina Forense de San Pedro Sula a esperar la entrega de los cuerpos.
Esa información haría más lenta la entrega de los cuerpos, por lo que los parientes tenían que seguir la larga espera.“Venimos de Tela, y mi hermano Santiago Zelaya Martínez era de allá y tenía tres meses de estar preso”, expresó una de sus hermanas.

Mientras los familiares seguían llegando a preguntar por sus parientes, tres equipos de Medicina Forense trabajaban realizando autopsias para comenzar a entregar los primeros cuerpos en horas de la noche.

Los 18 cuerpos terminaron de ser trasladados a la morgue de San Pedro Sula a las 3:00 pm, por lo que la entrega podría alargarse hasta hoy.

Las familias comentaban entre ellas que todos se iban a reunir el 24 de diciembre, pues es una fecha en la que no les piden muchos documentos para visitas.

Foto: La Prensa

Ataúd de unos de los fallecidos en el penal.
“Me dijo ‘traeme ropa y una gorra’, y ya se la tenía lista”, señaló una de las parientes de Jashuan Josué Chirinos Connor (de 20 años) quien murió en el ataque.

Aunque los parientes no conocían detalles de lo que había sucedido en el interior del penal, piden una investigación pues aseguran que en el penal saben quiénes estaban armados.

La mayoría de los 18 fallecidos estaban acusados de delitos de robo, portación ilegal de armas y pocos habían sido sentenciados.

José Gómez, tío de Carlos Alberto Manzano, expresó que su sobrino tal vez cometió sus errores, pero como ser humano lo habían apoyado.

“Ahora nos toca apoyar y criar a sus tres hijos, porque nadie nos ayudará”: José Gómez,
tío de víctima
“Creíamos que estaba seguro en el penal, pero mire lo que pasó. Es una tragedia que la familia no se espera y menos para un hombre que tiene tres hijos pequeños”, agregó.

Carlos Alberto Manzano Zelaya estaba recluido en el penal de Tela desde el 27 de febrero de 2018 y tenía programado su juicio para el 14 de enero de 2020 por un delito de tentativa de robo.

Con tristeza, parientes de Noel Orlando Aguilar Cabrera (de 34), quien era originario de Yoro, esperaban que el tiempo pasara rápido, pues él iba a lograr su libertad en 2021.

Esa misma esperanza tenían los parientes de César Emilio Peña Villanueva (de 25), quien fue condenado a 5 años de prisión y estaban en trámite para lograr la conmutación de la pena.

Dijeron que un defensor público fue el que les llevó el juicio hasta septiembre que lo declararon culpable, pero creían que para diciembre estaría libre, no muerto.

Entregan los primeros cuerpos en la morgue de SPS

SAN PEDRO SULA. Después de ocho horas de autopsias y de identificación de cada una de las víctimas mortales que ingresaron a la morgue, cuatro cuerpos fueron entregados ayer por la tarde a sus familiares.Los equipos de forenses así como técnicos en dactilocospia comenzaron a trabajar desde la mañana en las autopsias y la comparación de huellas.

Se informó que al llegar a la morgue los primeros siete cadáveres procedentes de Tela, coordinaron con el Registro Nacional de las Personas para que les enviaran los padrones dactilares de cada uno de los fallecidos.

Aunque cada uno de los cuerpos fue llevado con su nombre a Medicina Forense , tenían que verificar su identidad por medio de las huellas. Los restos de las primeras cuatro víctimas fueron entregadas a sus familiares entre las 6:00 pm y 7:00 pm.
Estaba previsto que durante la noche y madrugada iban a entregar los demás.Parientes de las víctimas previamente tuvieron que entregar la documentación para acreditar el parentesco.

Familiares de Santiago Zelaya Martínez retiraron su cuerpo.