12/05/2025
09:19 PM

La capital, una cumpleañera vulnerable

La reina pero frágil capital de Honduras está de fiesta. El regocijo llegó luego de haber pasado momentos de debilidad al sufrir una vez más los efectos de la lluvia.

La reina pero frágil capital de Honduras está de fiesta. El regocijo llegó luego de haber pasado momentos de debilidad al sufrir una vez más los efectos de la lluvia.

Se celebran 429 años de servicio este año, en medio de la vulnerabilidad, el crecimiento habitacional desordenado y el aumento desmedido de la población.

Desde temprano, los habitantes se volcaron a la calle Real de su hermana gemela, Comayagüela, para participar de las celebraciones.

Sonido de las bandas

La celebración inició desde muy temprano con la quema de pólvora, para dar paso al desfile de los estudiantes. La marcha inició con los caballeros cadetes de la Academia Militar General Francisco Morazán; simultáneamente apareció un grupo de motocicletas y autos antiguos que causaron sensación entre los presentes.

Las autoridades municipales no se quedaron atrás, pues aplaudieron hasta el cansancio a cada uno de los grupos que se unieron en la celebración.

Las hermosas palillonas y las intepretaciones de las bandas de guerra se hicieron sentir hasta por la tarde, pues más de 31 institutos se dieron cita en el desfile, entre ellos el instituto Privado Lempira, centro educativo que funciona en la ciudad de San Pedro Sula y que por primera vez se sumó a la celebración del cumpleaños de la ciudad, y el instituto Intervalle de la ciudad de Danlí.

Marco Tulio Paniagua, maestro, felicitó a todos los capitalinos por estar de aniversario y agradeció el caluroso recibimiento que se brindó a los 65 alumnos que conforman la banda de guerra, quienes se sumaron en la marcha.

Mensaje

Antañona Colegiales evocaron con fotografías la antigua capital.

En horas del mediodía, sin interrumpir el desfile, las autoridades eclesiales, gubernamentales y el pueblo católico se reunieron en la catedral para participar de la eucaristía en honor a San Miguel Arcángel, santo patrón de los capitalinos.

La misa fue presidida por el obispo auxiliar Juan José Pineda en compañía del nuncio apostólico Antonio Arcari y un grupo de sacerdotes de diversas parroquias. Luego de leer el evangelio, el obispo enumeró los múltiples problemas que aquejan al Distrito Central a través de un relato descriptivo elaborado como si se tratase de un comentario, pero sin obviar ningún detalle.

'He visto cómo crece la ciudad en megacomercios que arrinconan a los pobres con sus mesas de chicles en las esquinas donde hay tráfico, sol y calor; al igual he observado a quienes suben por entre los empinados cerros para llegar a sus hogares y cómo olvidar a aquellos que compran el agua a precio de estafa', dijo el obispo Pineda.

El sacerdote también mencionó la delincuencia, la inseguridad y la vulnerabilidad, pero no se olvidó de mostrar la bondad, el espíritu de superación y de trabajo de los capitalinos, empezando por los vendedores ambulantes y barrenderos.

Autoridad

Ricardo álvarez manifestó sentirse orgulloso de ser el alcalde de la capital, aunque aún hace falta del apoyo de todos para enfrentar los problemas que se tornan más graves.

'Hoy es el momento de salvar a la capital, mañana puede ser muy tarde y para ello necesitamos los recursos; son 3 mil millones de lempiras que servirán para evitar la pérdida de vidas humanas', dijo.

La procesión en honor a San Miguel Arcángel por las calles del casco histórico y la fracción del pastel gigante, en honor a la ciudad, fueron los últimos eventos donde se unieron centenares de capitalinos antes de retornar a sus hogares.

En voz propia

'He visto una ciudad arrastrada por las aguas de la corrupción, una ciudad donde los vecinos llegan a los centros comerciales para apreciar a través de las vitrinas las mercancías que no pueden adquirir'.
Juan José Pineda, obispo auxiliar

'Hoy es el momento de salvar a la capital, mañana puede ser muy tarde y para ello necesitamos los recursos; son 3 mil millones de lempiras que servirán para evitar la pérdida de vidas humanas'.

Ricardo Álvarez
Alcalde de Tegucigalpa

Quién como Dios

La fundación de la antañona Real de Minas aconteció el 29 de septiembre de 1578. Desde esa memorable época hasta nuestros días, el príncipe de las milicias celestiales es el soberano protector de la actual capital de la República.

Alegría Los reyes feos pusieron la nota jocosa de la actividad.

Así como San Miguel ha elegido a Tegucigalpa como su mansión terrenal, también los capitalinos lo han denominado su custodio... y qué mejor que un arcángel mayor, cuyo nombre en hebreo significa 'quién como Dios'.

En el altar mayor de la catedral, de incomparable y original estilo barroco, construido por Vicente Gálvez y sus hijos, luce imponente la imagen de San Miguel Arcángel, rodeado además de otras sagradas figuras como la de Santa María Virgen y otros ángeles celestiales como Uriel, Salatiel y Rafael.

Las solemnes procesiones que en su honor tienen lugar cada 29 de septiembre, y que recorren las principales calles de la ciudad, son otras expresiones de fe que se prodigan al santo de Tegucigalpa.

No hay que olvidar los rezos que impone la novena y los cánticos alusivos a la celebración.

El número

429 Años
De fundación son los que celebra la capital de la República cada 29 de septiembre, justamente el día de San Miguel Arcángel. Así quedó instituido como su santo patrón.

El año

1765
Ese año comenzó a construirse la parroquia, siendo papa Benedicto X, quien la asciende a catedral, nombrándola además madre de todas las iglesias de Honduras.