El clamor por tener un centro de salud adecuado en el casco urbano de Omoa está llegando a su fin, porque ya se construye un nuevo edificio.
El centro de salud Rigoberto Milla funciona donde antes estaba un comedor infantil propiedad de la Alcaldía, ya que el edificio se dañó desde el terremoto del 28 de mayo de 2009.
En el área del consultorio están apiñadas todas las puertas que habían en el viejo edificio, las cuales son utilizadas para cubrir el espacio de los ventanales.
La clínica de odontología también funciona en condición crítica, en un espacio que solo cabe una pequeña silla donde es colocado el paciente mientras trabaja el odontólogo.
En este mismo local están ubicadas las oficinas de la coordinación del área de salud del municipio.
“Desde hace tres años hemos luchado para llamar la atención de la Secretaría de Salud para que se realice el proyecto, pero fue hasta este año que la ong Cepudo se hizo cargo del proyecto e iniciaron la construcción”, dijo el alcalde Ricardo Alvarado. La Alcaldía invierte 120 mil lempiras mensuales en pago de enfermeras vigilantes y personal de aseo.
El funcionario dijo que en un terreno donado por la Alcaldía se está construyendo el mini hospital que descongestionará las atenciones del hospital de área de Puerto Cortés.
