Tegucigalpa, Honduras.
A un día de la fiesta en honor a la patrona de Honduras, en la comunidad de Suyapa se vive con júbilo y regocijo. Contingentes de seguridad, cuerpos de socorro, grupos de asistencia médica, alimentación y otros se desplazan por la zona.
Ayer, una de las celebraciones eucarísticas estuvo a cargo de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), que además de dar gracias puso en manos de La Morenita los destinos de la institución.
Desde los rincones lejanos de esta tierra catracha, cargados con maletas, los pies cansados, pero el corazón rebosante de alegría, así llegan los hijos a celebrar los 269 años del hallazgo de la imagen de la Virgen de Suyapa.
En cada peregrino que se acerca a la Basílica, venga de cerca o lejos, le acompaña una historia de fe, agradecimiento y devoción.
Este es el caso de Blanca Hernández, procedente del municipio de Guajiquiro, departamento de La Paz, quien recorrió de rodillas desde la entrada al Altar Mayor para ver a la Virgencita.
“Vengo a darle gracias y a pedirle a la madre santísima por mi vida y la de mis hijos”, manifestó la devota, luego de elevar su plegaria.
Hoy es la antesala de la gran fiesta. A las 3:00 pm se hará la misa desde El Piligüín, sitio del hallazgo, y en la Basílica habrá conciertos.
A un día de la fiesta en honor a la patrona de Honduras, en la comunidad de Suyapa se vive con júbilo y regocijo. Contingentes de seguridad, cuerpos de socorro, grupos de asistencia médica, alimentación y otros se desplazan por la zona.
Ayer, una de las celebraciones eucarísticas estuvo a cargo de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), que además de dar gracias puso en manos de La Morenita los destinos de la institución.
Desde los rincones lejanos de esta tierra catracha, cargados con maletas, los pies cansados, pero el corazón rebosante de alegría, así llegan los hijos a celebrar los 269 años del hallazgo de la imagen de la Virgen de Suyapa.
En cada peregrino que se acerca a la Basílica, venga de cerca o lejos, le acompaña una historia de fe, agradecimiento y devoción.
Este es el caso de Blanca Hernández, procedente del municipio de Guajiquiro, departamento de La Paz, quien recorrió de rodillas desde la entrada al Altar Mayor para ver a la Virgencita.
“Vengo a darle gracias y a pedirle a la madre santísima por mi vida y la de mis hijos”, manifestó la devota, luego de elevar su plegaria.
Hoy es la antesala de la gran fiesta. A las 3:00 pm se hará la misa desde El Piligüín, sitio del hallazgo, y en la Basílica habrá conciertos.
