Lluvias intermitentes previstas para esta semana no representan una amenaza para los niveles de los principales ríos ni para los municipios que integran el valle de Sula, a pesar de las múltiples incidencias que han afectado la zona en días anteriores, tales como viviendas inundadas y deslizamientos, según los más recientes monitoreos llevados a cabo por el Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos).
Para hoy, jueves, se anticiparon precipitaciones durante la mañana y el mediodía, especialmente en las áreas más bajas del valle, con interrupciones entre la tarde y la noche. La cobertura nubosa se situará entre 20 y 30 kilómetros, mientras que se esperan oleajes elevados de hasta cuatro pies.
Aunque se pronostican inundaciones urbanas para hoy, no se espera que alcancen magnitudes significativas, siendo el resultado de lluvias que podrían alcanzar hasta 20 milímetros en municipios como Omoa, Puerto Cortés, Choloma, en Cortés; y parte de El Progreso, en Yoro. Además, se prevén deslizamientos importantes debido a la saturación de los suelos.
Entre el 30 de octubre y 15 de noviembre, según Bomberos, se documentó la evacuación de 1,594 personas por inundaciones y deslizamientos, 14 deslizamientos, 13 derrumbes, 40 casos de inundaciones, 4 personas desaparecidas, así como siete muertos, dos esta semana en Yoro.
La situación más crítica se observa en Santa Bárbara, especialmente en Quimistán, donde se pronostican lluvias de hasta 20 milímetros en las próximas horas.
Desde el lunes 13 de noviembre de 2023, las precipitaciones han vuelto a intensificarse en la parte alta de este municipio. Considerando que la saturación del suelo alcanza casi el 100%, el agua de las lluvias torrenciales se desplaza con rapidez hacia las microcuencas y cuencas de los ríos y quebradas.
Esto ha generado crecidas repentinas que continúan interrumpiendo los accesos y dejando aisladas nuevamente a diversas comunidades.
Este fenómeno ha agravado las afectaciones en la infraestructura de puentes, cajas puentes, vados y sistemas de alcantarillados, además de ocasionar daños a cientos de kilómetros de carreteras y afectar los cultivos locales.
Las lluvias también han provocado fuertes escorrentías en calles y avenidas, resultando inundaciones en solares y áreas urbanas planas. Las mismas comunidades que sufrieron las consecuencias del primer frente frío ahora se ven impactadas por la cuña de alta presión.
En total, casi 60 comunidades se ven afectadas, con más de 40 de ellas incomunicadas y 2,955 familias, equivalentes a 14,775 personas.
Karen Cruz, coordinadora del comité de emergencias en el valle de Sula, comunicó que, además de Quimistán, las localidades de Omoa y Puerto Cortés han enfrentado significativas inundaciones en viviendas, así como en calles y deslizamientos. Estos eventos han generado un notable número de evacuaciones y refugiados que han buscado albergue.
Mientras tanto, en municipios como Choloma, Villanueva, Pimienta, Potrerillos, San Manuel Cortés, La Lima, San Pedro Sula, la mayoría de puntos de El Progreso y otras localidades que conforman la zona metropolitana del valle de Sula, se ha observado una mejoría tras las intensas lluvias. Esto ha permitido que las familias regresen gradualmente para limpiar sus hogares y reorganizarse.
Inestabilidad
Francisco Argeñal, director de Cenaos, informó que no se anticipan crecidas en los ríos Ulúa y Chamelecón, pero sí en los ríos más pequeños, lo que podría resultar en la incomunicación de varias comunidades, como es el caso del municipio de Quimistán. Pese a que la cuña de alta presión seguirá afectando con lluvias hasta este viernes o parte del sábado, se espera que el fin de semana mantenga condiciones estables, con altas probabilidades de ampliarse este pronóstico hasta el martes de la siguiente semana.
“Del miércoles en adelante podríamos tener otro frente frío que desencadenaría incluso lluvias más fuertes que las de ahora en el valle de Sula”, advirtió Argeñal.
Los departamentos de Colón, Copán, Atlántida, Olancho Gracias a Dios e Islas de la Bahía siguen con abundante nubosidad, temperaturas frescas y precipitaciones. El resto está en alerta verde.