La policía guatemalteca capturó a cuatro supuestos narcotraficantes, a quienes acusan de ordenar a policías el asesinato de tres diputados salvadoreños al Parlamento Centroamericano.
'Fueron ellos quienes desarmaron el carro de los diputados cuando estaban buscando dinero o droga, sabemos que ellos son parte de los autores intelectuales del crimen', dijo el martes a la AP el ministro de gobernación Carlos Vielman.
Las capturas se registraron en las primeras horas del martes en el municipio de Jalpatagua, ubicado a unos 100 kilómetros al sureste de la capital.
En el operativo participaron unos 600 agentes de la fuerza elite policial, además de investigadores y fiscales del Ministerio Público.
La fiscalía dijo que no tiene evidencia para confirmar que los cuatro civiles capturados, tres hombres y una mujer, tengan vínculos con el narcotráfico y que el asesinato de los diputados es producto de 'una equivocación'.
Los tres parlamentarios salvadoreños y su conductor fueron secuestrados, ejecutados y quemados el 19 de febrero.
'Mi apreciación es que se confundieron al interceptar la camioneta', dijo en conferencia de prensa el fiscal a cargo de la investigación, Alvaro Matus.
Roberto D'Aubuisson, hermano mayor de Eduardo D'Aubuisson, uno de los tres diputados salvadoreños asesinados, dijo en San salvador que evaluará si su familia participará en el proceso de los detenidos como querellante.
'Lo que sí tenemos que ver es primero que haya sustentación de las pruebas y del caso contra estos tipos para que se puedan indiciar judicialmente y bueno, lo demás lo estamos valorando', apuntó en entrevista al canal 6 de televisión.
Además de los civiles detenidos, por lo menos siete investigadores de la policía estaban implicados en el crimen. Cuatro de ellos fueron capturados y asesinados posteriormente en una cárcel de máxima seguridad en circunstancias que aún no se aclaran.
Dos están prófugos y otro más, Marvin Contreras Natareno, se entregó hace dos semanas para convertirse en testigo clave.
El jefe de la policía, Erwin Sperissen, dijo a la prensa local días después de la ejecución de los agentes en la cárcel que en el de la captura, estos le indicaron que narcotraficantes del municipio de Jalpatagua les habrían ordenado matar a los parlamentarios.
La fiscalía se apoyó en vídeos de vigilancia de una gasolinera donde los capturados compraron el combustible que luego fue usado para quemar a los parlamentarios y su vehículo.
Además existen registros de llamadas telefónicas entre los policías y los supuestos narcotraficantes antes de que se cometiera el asesinato.
Vielman dijo que durante la investigación que la policía hizo para dar con los autores del crimen de los diputados, descubrieron que los cuatro civiles capturados se dedicaban a transportar cocaína a través de Guatemala en su ruta desde Sudamérica hacia Estados Unidos.
En Guatemala tanto la fiscalía dirige las investigaciones criminales pero se apoya en investigadores de la policía.
El policía que se entregó, Contreras, dijo al juez que los otros cuatro policías buscaban 'un cuadro', es decir una cantidad grande de droga, dentro del vehículo.
Vielman dijo que además de Contreras Natareno, 'los cuatro policías capturados (que luego fueron muertos en la cárcel) dijeron que el asesinato de los diputados fue por un 'tumbo'', es decir un robo de droga o dinero entre narcotraficantes.
