04/12/2025
05:49 PM

'Estos 19 años como obispo he ordenado a 25 sacerdotes”

Monseñor Ángel Garachana dijo que aún le falta mucho que hacer en la Iglesia

El trabajo vocacional de monseñor Ángel Garachana durante sus 19 años como obispo de la Diócesis de San Pedro Sula dio sus frutos. La Iglesia ha ordenado 25 sacerdotes y asegura que cuando se retire la suma será mayor.

Además de la celebración del 267 aniversario de la Virgen de Suyapa, este 3 de febrero, la feligresía sampedrana estará de manteles largos por el décimo noveno aniversario de monseñor Ángel Garachana como obispo de la Diócesis de San Pedro Sula.

Aunque Garachana tuvo la opción de ser ordenado obispo en la ciudad de Roma por el papa Juan Pablo II, eligió la catedral San Pedro Apóstol y estar acompañado por sus feligreses sampedranos en esa fecha tan especial, la cual por decisión de él coincidió con el aniversario de la Morenita de Honduras.

“Lo propio era que el obispo se ordenara en su Diócesis. Pertenezco a la congregación Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María y pensé que debe ser una fiesta mariana. Viendo las fechas decidí el 3 de febrero, día de la Virgen de Suyapa”, contó.

El prelado confiesa que no esperaba su nombramiento, ya que en aquel entonces era el superior de los misioneros claretianos de Castilla, en España, y le faltaban tres años para finalizar su labor; sin embargo, desde su ordenación empezó a trabajar para captar a los hondureños que mostraban vocación por el sacerdocio.

“Me encontré solo con dos sacerdotes. Ahora solo queda uno de ellos. Una de mis prioridades era tener un presbiterio hondureño y buscar ayuda de misioneros y congregaciones para la iglesia”.

Esta es una meta que ha alcanzado con mucho esfuerzo, paciencia y dedicación, ya que monseñor ha ordenado a 25 sacerdotes, pero su objetivo es ordenar al menos tres sacerdotes por año hasta retirarse como obispo en 2020.

Ya ordenó a dos nuevos diáconos y espera que se conviertan en sacerdotes en agosto de este año y otros tres seminaristas han terminado su teología en el seminario mayor y, si perseveran, podrán ser ordenados sacerdotes en 2015. Otro de sus objetivos cumplidos ha sido formar e incorporar laicos a las actividades de la Iglesia y la evangelización.

Debido a los cambios en el país, el obispo convocó en 2011 la realización del sínodo diocesano, que estuvo listo para el 50 aniversario de la Diócesis de San Pedro Sula, el año pasado. En los cuadernillos hechos por unas 25 mil personas durante ocho meses quedaron plasmados las reflexiones y el análisis de la realidad de Honduras, de propuestas pastorales.

El prelado confía ahora en que ese plan pastoral los guiará estos próximos seis años y con él esperan conseguir la consolidación de la Iglesia.

Pese a que la Diócesis tiene 33 parroquias en diferentes puntos de la ciudad, se necesitan más. No obstante, es imposible construirlas por el déficit de sacerdotes.

El religioso asegura que ese no ha sido impedimento para seguir trabajando en el crecimiento de la feligresía. Año con año se construyen unas 15 iglesias o capillas en San Pedro Sula.

Monseñor se refirió a los principales problemas de San Pedro Sula, los cuales espera que resuelva el alcalde Armando Calidonio.

“Es evidente que San Pedro Sula no solo está estancada, sino que ha retrocedido, desde la condición de las calles de barrios, colonias y el centro hasta el desarrollo de los proyectos de infraestructura.

Mi llamado sería a que los sampedranos sean críticos con nuestras autoridades y exijan el cumplimiento de las promesas”.

Añadió que la administración de Óscar Kilgore (2002-2006) fue la última que contribuyó a las mejoras de la catedral con la iluminación en el exterior, a pesar de que los alrededores del templo están muy descuidados y saturados de vendedores.

“Si la Municipalidad quiere colaborar con la mejora de la fachada de la catedral, por lo que representa para la ciudad, bienvenido sea, aunque siempre hemos buscado la independencia de la Iglesia, sería muy agradecido”, concluyó.