'Estamos en medio de un caos. Los cadáveres se comienzan acumular, esperamos el llamado para poder ir a ayudar a las personas afectadas'.
Así describe Simey Martínez, una doctora hondureña que reside en Ecuador, la difícil situación que se afronta en ese país luego del trágico terremoto que deja por ahora 486 fallecidos y miles de heridos.
La doctora hondureña explicó en una entrevista exclusiva con Diario LA PRENSA, que se viven momentos de pánico, pues 'no hay agua, energía, ni alimentos' en diversas zonas afectadas por el teremoto.
La hondureña agregó que hay aproximadamente más de mil hondureños viviendo en Ecuador y que por dicha ninguno de ellos se reporta herido o fallecido.
'Hay una gran cantidad de médicos hondureños que esperan el llamado, para asistir al pueblo ecuatoriano' asegura la doctora.
Martínez vive desde hace años en Ecuador y trabaja como médico rural en Riobamba, una ciudad ubicada a unos 390 kilometros del devastado pueblo ecuatoriano de Pedernales, donde se originó el epicentro.