La Ceiba, Honduras.
Entre 500 y 800 metros cúbicos de sedimento se están sacando a diario de las aguas del muelle de cabotaje de La Ceiba, que empezó a ser dragado tras permanecer unos cinco años azolvado.
Este problema ha impedido que embarcaciones de gran calado puedan ingresar al muelle con mercadería ocasionando pérdidas a los empresarios.
Los trabajos iniciaron de manera oficial a las 10:15 am del lunes, luego de un estudio de batimetría que determinó la cantidad de cieno que debe extraerse.
Una barcaza con una retroexcavadora de brazo largo es el equipo que se está utilizando para hacer el dragado que tendrá una profundidad de unos 15 pies. La limpieza se inició en la bocana, que es la más azolvada. “Aquí es donde está más seco, apenas hay un metro de profundidad. Vamos a estar trabajando hasta cuando las condiciones del tiempo lo permitan, ya que este lugar depende de ello”, explicó Ashfor Bodden, miembro de la comisión administradora de este puerto y encargado del proceso de dragado.
En este sitio se excava un canal en línea recta, ya que todo este tiempo las embarcaciones tienen que navegar haciendo una “U”, para poder entrar y salir al puerto. “Vamos a tratar de abrir este canal para que el acceso al muelle sea mejor, pero todo depende de cómo esté el clima”, recalcó Bodden.
El material extraído es depositado en la barcaza, luego es desembarcado en volquetas a un terreno que ha sido acondicionado cerca de este puerto. “Para sacar el material utilizamos una retroexcavadora 320CL con una capacidad de medio metro cúbico cada vez que extrae”, detalló Cecilio Acosta, ingeniero de la empresa Moya Contractor, responsable de hacer este proyecto. “Se va a profundizar, se tiene previsto unos dos meses para terminar este trabajo”, indicó Acosta.
Se limpiarán 16,000 metros cúbicos, unos nueve mil metros corresponden a la bocana y el resto en la dársena. “Estamos viendo que todo lo que se desarrolla sea en pro del ambiente, la contaminación no ha variado”, opinó Juan Alberto Hernández, ambientalista ceibeño.
Según Hernández lo que se está haciendo en el muelle originará un plan de gestión ambiental, ya que en la dársena hay muchos barcos hundidos convertidos en chatarra y ocasionando una contaminación permanente.
Entre 500 y 800 metros cúbicos de sedimento se están sacando a diario de las aguas del muelle de cabotaje de La Ceiba, que empezó a ser dragado tras permanecer unos cinco años azolvado.
Este problema ha impedido que embarcaciones de gran calado puedan ingresar al muelle con mercadería ocasionando pérdidas a los empresarios.
Los trabajos iniciaron de manera oficial a las 10:15 am del lunes, luego de un estudio de batimetría que determinó la cantidad de cieno que debe extraerse.
Una barcaza con una retroexcavadora de brazo largo es el equipo que se está utilizando para hacer el dragado que tendrá una profundidad de unos 15 pies. La limpieza se inició en la bocana, que es la más azolvada. “Aquí es donde está más seco, apenas hay un metro de profundidad. Vamos a estar trabajando hasta cuando las condiciones del tiempo lo permitan, ya que este lugar depende de ello”, explicó Ashfor Bodden, miembro de la comisión administradora de este puerto y encargado del proceso de dragado.
En este sitio se excava un canal en línea recta, ya que todo este tiempo las embarcaciones tienen que navegar haciendo una “U”, para poder entrar y salir al puerto. “Vamos a tratar de abrir este canal para que el acceso al muelle sea mejor, pero todo depende de cómo esté el clima”, recalcó Bodden.
El material extraído es depositado en la barcaza, luego es desembarcado en volquetas a un terreno que ha sido acondicionado cerca de este puerto. “Para sacar el material utilizamos una retroexcavadora 320CL con una capacidad de medio metro cúbico cada vez que extrae”, detalló Cecilio Acosta, ingeniero de la empresa Moya Contractor, responsable de hacer este proyecto. “Se va a profundizar, se tiene previsto unos dos meses para terminar este trabajo”, indicó Acosta.
Se limpiarán 16,000 metros cúbicos, unos nueve mil metros corresponden a la bocana y el resto en la dársena. “Estamos viendo que todo lo que se desarrolla sea en pro del ambiente, la contaminación no ha variado”, opinó Juan Alberto Hernández, ambientalista ceibeño.
Según Hernández lo que se está haciendo en el muelle originará un plan de gestión ambiental, ya que en la dársena hay muchos barcos hundidos convertidos en chatarra y ocasionando una contaminación permanente.