Aunque la afluencia de turistas a las playas y balnearios durante la Semana Santa no fue la que se esperaba, la ocupación hotelera y los establecimientos de comidas y otros servicios lograron superar sus expectativas luego que sus esperanzas se vieron amenazadas por el mal tiempo que imperó al comienzo de la Semana Santa.
“Gracias a Dios que pudimos hacer algo, y lo bueno es que las lluvias se anticiparon y no afectaron los días fuertes, como en otras ocasiones cuando el Jueves y Viernes Santo estuvo lloviendo”, comentó Manuel Cálix, un vendedor de comidas establecido en el Paseo de Los Ceibeños. La ocupación hotelera fue satisfactoria este año, ya muchos de estos establecimientos tenían reservaciones anticipadas. “Hubo ganancias, estuvo muy concurrido, la afluencia se empezó a sentir desde el primer domingo de la Semana Santa, ya el martes y miércoles hubo una baja; pero del jueves al sábado estuvo abarrotado nuestro local”, informó Jane Woods, supervisora de personal del centro turístico Aqua Park
El cierre de la temporada fue con un espectacular show de luces y fuegos artificiales en el concurrido Paseo de Los Ceibeños adonde hubo música y mucha alegría.
En Tela, aunque se notó menos cantidad que el jueves, viernes y sábado, se apreciaron enormes caravanas de bañistas que pasaron sus vacaciones en esa ciudad. Carlos Canela, jefe de la Policía de Turismo en Tela, dijo que llegaron unos 850 mil veraneantes entre nacionales y extranjeros. Allí registraron la llegada de 817,805 turistas nacionales y 31,583 extranjeros.
