26/04/2024
10:46 AM

Defensa de Rosa Bonilla tilda de “arbitraria” la decisión de no conceder cambio de medidas

Juan Carlos Berganza, apoderado legal de Bonilla de Lobo, aseguró que el Tribunal de Sentencia “ha cometido ilegalidades que más temprano que tarde tendrá que pagar por ellas”.

TEGUCIGALPA, HONDURAS

Tras la petición de cambio de medidas para defenderse en libertad y la posterior determinación de un Tribunal de Sentencia, que decidió que la ex primera dama, Rosa Elena Bonilla, continuará en prisión, su equipo de defensa legal salió al paso y tildó la resolución como “arbitraria e ilegal”.

“Pese a que el informe de Medicina Forense nos da la razón y dice que para que doña Rosa se recupere se necesitan 18 meses que no debe estar ni siquiera en el hospital, mucho menos en el centro penal, pero el juez determinó que no, que siga la cárcel”, cuestionó Juan Carlos Berganza, apoderado legal de Bonilla de Lobo.

Berganza aseguró que el Tribunal de Sentencia “ha cometido ilegalidades que más temprano que tarde van a tener que pagar por ellas, porque las resoluciones que han emitido son arbitrarias, por lo tanto, en su momento van a tener que responder”.

Días atrás, Rosa Bonilla sufrió un ataque de pánico que la mantiene hospitalizada en una clínica privada de Tegucigalpa.

Decisión del Tribunal de Sentencia

Luego de hacer la deliberación y sus respectivas valoraciones sobre lo manifestado por las partes procesales, la jueza que presidió la sala notificó: “Por mayoría de votos de los miembros de la sala de este tribunal designado de los Tribunales de Sentencia Anticorrupción, mantenemos la medida privativa de libertad”.

Asimismo, el tribunal rechazó la sustitución de las medidas y las medidas propuestas por la defensa de arresto domiciliario y una caución hipotecaria de un bien inmueble valorado en más de L14 millones.

Se trata de la segunda vez que el tribunal hondureño se opone a la excarcelación de la ex primera dama, ya que el pasado 22 de julio rechazó modificar las medidas cautelares de prisión preventiva que le impusieron a Bonilla y que cumple en la Penitenciaría Femenina de Adaptación Social, situada unos 25 kilómetros al norte de Tegucigalpa.

El cambio de cárcel por arresto domiciliario fue solicitado por la defensa de Bonilla luego de que la ex primera dama sufrió el fin de semana un ataque de pánico que la mantiene hospitalizada en una clínica privada de la capital hondureña.

La crisis de Bonilla deriva de la muerte de su hijo Said Lobo Bonilla, quien fue asesinado a tiros a mediados de julio en Tegucigalpa junto a tres hombres.

Evaluación a la ex primera dama

El médico forense José Fernando Medina Riera, encargado de evaluar a Rosa Bonilla, declaró ante el tribunal que “en el examen mental encontramos que sobresale (en ella) la afectividad física y ansiosa”. Según Medina, en el expediente clínico lo que sobresale es lo que se describe como taquicardia, sensación de ahogos, mareos, escalofríos, miedo.

El forense finalizó: “Se llegó a la conclusión de que la paciente tiene trastorno de depresión mayor, reacción de duelo y ataque de pánico, concluyendo de que la evaluada debe continuar con el tratamiento psiquiátrico iniciado, pero ambulatoria”.

Causa judicial contra Bonilla

La ex primera dama fue condenada el pasado 17 de marzo en la repetición del juicio por fraude y apropiación indebida continuada de recursos a título de coautora, según la resolución del Tribunal de Sentencia.

Bonilla fue detenida el 28 de febrero de 2018 luego de una investigación del Ministerio Público coordinada con la otrora Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih), que dependía de la Organización de Estados Americanos (OEA).

La exprimera dama fue detenida en 2018, acusada por corrupción por la extinta Maccih.

Su ex secretario privado Saúl Escobar también fue declarado culpable por un delito de fraude a título de coautor en perjuicio de la Administración Pública.

Según la denuncia del Ministerio Público, los acusados “conformaron una organización delictiva para apropiarse de fondos durante los años 2011 al 2015 a través de 70 cheques otorgados a nueve personas simulando relaciones contractuales, para dar apariencia de legalidad, que después convertían en dinero en efectivo”.

Bonilla manejó una cuenta bancaria, donde tuvo ingresos por 94,7 millones de lempiras (3,8 millones de dólares), recursos provenientes de diferentes fuentes, entre ellas donaciones de la Embajada de Taiwán para proyectos sociales que debían ser ejecutados por la Unidad de Desarrollo Comunitario (Udeco) durante el período 2011-2014, señaló.

La ex primera dama abrió el 22 de enero de 2014 una cuenta personal en un banco hondureño y ese mismo día depositó “12 millones de lempiras (unos 490.739 dólares) a través de un cheque proveniente de una cuenta oficial”, indicó el Ministerio Público.

Rosa Elena Bonilla de Lobo es esposa del expresidente hondureño, Porfirio Lobo Sosa (2010-2014).