La cifra de hondureños que acabaron fusilados y botados en una fosa de un rancho en México es de 21, quince plenamente identificados y seis reconocidos por familiares a través de fotografías.
Todos los cuerpos serán repatriados bajo el costo del Gobierno de Honduras, los primeros 14 por la Fuerza Aérea y el resto en aerolíneas comerciales, declaró a LA PRENSA el vicecanciller de Honduras, Alden Rivera, quien está a tiempo completo gestionando la salida de los cuerpos desde la capital mexicana. Ayer el vicecanciller de México le notificó la autorización y se espera que el martes un avión de la FAH haga el traslado desde Reynosa.
El Gobierno de México ha anunciado el traslado de los 39 cadáveres sin identificar para este lunes a Medicina Forense de la Ciudad de México.
El vicecanciller mantiene reuniones constantes con representantes de la Procuraduría General de Justicia, PGJ, de Tamaulipas y México para coordinar la identificación. Se estima que de los 72 indocumentandos que aparecieron asesinados unos 30 serían hondureños.
Los migrantes viajaban el domingo anterior en un camión hacia la frontera con Estados Unidos cuando fueron interceptados y llevados a un rancho. El día de la matanza, uno a uno, los 58 hombres y 14 mujeres fueron colocados contra la pared dentro de una bodega. Luego se les obligó a quedarse con la cabeza baja y fueron fusilados con ráfagas de armas de alto poder. Al final, los asesinos remataron con el tiro de gracia a cada una de sus víctimas, según un sobreviviente ecuatoriano de 18 años.
Por el informe del ecuatoriano a infantes de Marina de México, los cuerpos fueron encontrados en un rancho cerca de la comunidad de San Fernando, en la jurisdicción de Tamaulipas.
La identificación
La tarea de identificación de los cuerpos asesinados no es fácil; la falta de documentación como características de los cuerpos no ayudan mucho para lograr definir la identidad de los cuerpos de hombres y mujeres que aguardan ser reconocidos.
El sábado se logró reconocer dos cuerpos más gracias a una partida de nacimiento que fue encontrada separada del cuerpo de las víctimas de la masacre. Lamentablemente era otro catracho que elevaba la cifra de hondureños. “Hicimos las verificaciones en Tegucigalpa, contactamos a los familiares, nos enviaron fotografías y a través de ese medio hicimos la identificación; como no fue un cuerpo acreditado por la PGJ del Estado de Tamaulipas, este cadáver no va a ser parte de la repatriación inicial que se hará esta semana”, dijo a LA PRENSA Alden Rivera, vicecanciller de Honduras.
El segundo caso es el de un acompañante de una de las víctimas que ha sido identificado por el testimonio de la familia, donde la ropa y otras características sirvieron para identificarlo; son dos familiares, tío y sobrino. Éstas son las dos personas que elevan las cifras de 14 a 16 hondureños. Ese número ahora es de 20.
“Tenemos establecido un procedimiento definido con el Gobierno de México y la primera decisión es que los cadáveres que no han sido identificados se estarán trasladando este lunes a Ciudad de México, se moverán desde Reynosa al DF porque aquí existen más recursos para hacer la identificación, hacer las pruebas de ADN y seguir el procedimiento que debemos enfrentar para identificar los cuerpos faltantes. Insisto que esa identificación tendrá muchas dificultades porque un grupo de estos 39 cadáveres que no están identificados seguirá en ese estatus y seguramente será imposible identificarlos”, dijo Rivera en entrevista con LA PRENSA.
La primera fase de repatriación se hará con los 14 cadáveres que fueron identificados inicialmente, esos cuerpos son preparados y lo hace el Gobierno de Honduras con sus recursos, para lo que hay autorización de México. El traslado se hará en un avión Fuerza Aérea Hondureña que volará a Reynosa el martes
“Hay una decisión del Gobierno de Honduras de asumir la responsabilidad completa de estos ciudadanos que perdieron la vida en San Fernando, estamos actuando como un gobierno responsable que se hace cargo de manera absoluta de todas sus compromisos. México ofrecía hacerse cargo de la repratiación, pero consideramos que eso es responsabilidad del Gobierno de Honduras. Los dos cuerpos identificados que estarían pendientes de repatriar se espera que lleguen al país en el transcurso de la semana y para ello se utilizarán los vuelos comerciales para que el jueves o viernes lleguen a Tegucigalpa”, dijo el funcionario.
Ante la situación que se vive en México por la oleada de violencia que azota la frontera norte, Honduras coordina con las entidades de derechos humanos un proceso de repatriación segura para los ilegales que han quedado varados en territorio mexicano y que con los acontecimientos que se registran quieren volver a Honduras.
“Me he reunido con los derechos humanos donde tenemos contacto con todas las instancias relacionadas en el problema de migrantes para que se coordine el retorno de todos aquellos que de manera voluntaria quieren regresar a Honduras. Invitamos a todos los hondureños para que tomen una decisión de regresar al país porque es lo más saludable en este momento para no exponerse y vamos a emprender una campaña de manera coordinada con la Comisión de Derechos Humanos para concienciar sobre el problema que se enfrenta al viajar como ilegales”, señaló Rivera a los enviados de LA PRENSA.
