Médicos forenses determinaron que existen dudas sobre la identidad de cuatro de las 16 víctimas de la masacre de inmigrantes entregadas por México.
Los restos arribaron el miércoles a Tegucigalpa y de inmediato fueron sometidos a exámenes médicos.
'Doce de ellos han sido plenamente identificados por muestras dactilares y odontológicas, así como por tatuajes e intervenciones quirúrgicas, pero hay dudas en cuatro de ellos', dijo el jueves en rueda de prensa la jefe de fiscales del Ministerio Público, Danelia Ferrera.
Agregó que no devolverán los cuerpos a México porque realizarán más exámenes debido a que 'podría tratarse de (otros) hondureños desaparecidos en su viaje clandestino a Estados Unidos'.
'Seguimos practicando más pruebas, especialmente de ADN, a fin de aclarar las dudas y determinar la identidad definitiva', subrayó.
Los restos investigados no pertenecen a los hondureños Jorge Alberto Osorto Sevilla, Carlos Alejandro Espinoza, William Geovany Ortez y Eredys Ayala, de acuerdo a las identificaciones suministradas por parientes y el equipo médico de la fiscalía.
Ferrera dijo que la fiscalía se mantiene en contacto con sus similares de Guatemala y El Salvador para determinar si los cuerpos podrían ser de esas nacionalidades.
Un grupo de fiscales hondureños irá las próximas horas a México con toda la información disponible de hondureños que se supone han muerto o desaparecido en recorrido sin documentos a Estados Unidos.
La información la compararán además con la disponible en la Procuraduría General mexicana de los otros migrantes fallecidos en la masacre.
Los restos de otros cinco hondureños son esperados el sábado aquí.
El canciller Mario Canahuati dijo a periodistas que 'tenemos problemas con algunos cadáveres porque no concuerdan con los datos que existen en los archivos oficiales... y, sin duda, se trata de una situación difícil porque hay familiares que esperan sepultar con dignidad a sus seres queridos'.
En lo que va del año más de 30.000 hondureños sin documentos han sido deportados por México y Estados Unidos, de acuerdo con cifras oficiales. En el 2009 la cifra fue de 25.000.
Un total de 400.000 hondureños han sido deportados desde 1997, según el gobierno, pero en Estados Unidos viven alrededor de 800.000 que envían 3.000 dólares en remesas familiares.
